amaría un espejismo, que el tiempo destruirá
como una nube de sucesos nuevos
que brotarán, para ocultar cuanto fuiste
en el pasado.
Ni siquiera la belleza sobrevive
a la siega de los días y cada segundo
es un cabello desprendido, que oculta
el horror que queda tras la belleza marchita.
Si tan sólo amara tu cuerpo, se disolverían
todos los actos de amor y quedarían
resumidos en anécdotas apuntadas
en un viejo calendario.
Si tú me has amado así,
sabrás del amargor de la mañana,
con su aspereza de resaca y la insatisfacción
de no hallar más que un cuerpo
vacío de sentimientos,
sobre un jergón desvencijado.
Escrito en Octubre 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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