No te fíes del espejo,
ni eres tan joven, ni yo... tan viejo.
Tu poema, rapeando
tiene el vigor y la fuerza,
que producto de esa inercia,
su ritmo vas contagiando.
Ahora, a ver por dónde salen
los problemas que denuncias,
con tu ritmo, así se anuncian
y por su denuncia, valen.
Todo tendrá su sentido,
si se vuelve de revés,
todo aquello que no ves
y que se da por perdido..
Porque el motivo es seguir
y plantear de esta vida
su proporción y medida,
que esté muy lejos de herir.
Se trata de subsistir
a pesar de las mentiras
de políticas suicidas,
que sólo intentan seguir.
Y mantener su poder,
desviando la atención
en medios de comunicación
y esto ya,¡ No puede ser!.
Debemos despabilar
y aún, al perder la paciencia,
tomar desde la inteligencia
lo que podamos usar.
Que no se arregla en un bar,
si al tomar unas cervezas,
nuestro ánimo tropieza
y acaba por claudicar.
Es poner el corazón,
coraje e inteligencia,
para cambiar la conciencia
del mundo o de una nación.
Esto es imperativo
para este mundo precario:
Lucha y conciencia, a diario
¡ Qué ya nos sobran motivos! .
Escrito en Febrero 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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