pasa en secuencias...breves, largas,
sin pelo o con barbas.
En una sencilla puesta en escena,
todos deambulamos, amamos,
sufrimos, odiamos.
Navegamos en mares de incertidumbre y
quemamos algunas vanidades,
para que no se nos note
el más mínimo interés y se genere la envidia.
Antes todo, que permitir la corrosión del alma,
sin un exceso de humildad,
pero con la justa altivez, que nos permita
vencer todas las dificultades.
Una nota intermedia o bemol, tendrá
la justa medida y el brillo, para sonar
sin estridencias y acariciar los oídos
sin excesivo halago, en una hermosa cadencia.
Así se debe caminar por la vida,
con firmeza y suavidad, permitiendo
que la flor exprese su belleza
y el viento agite los sueños.
Escrito en Febrero 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
I.S.B.N : 978 – 84 – 17279 – 06 – 6
Depósito Legal: BI – 1323 -2018
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