en una misma madera,
alguien los ve y no se entera
de que siguen separados.
Así nos clava la vida,
separando los destinos,
por diferentes caminos
o una vereda perdida.
A veces, el coincidir,
tan sólo es cuestión de suerte,
si quiero volver a verte,
tu camino he de seguir.
Atajos siempre encontramos,
sin apenas pretenderlo
y debemos entenderlo,
que a veces nos olvidamos.
Los destinos se separan,
pero en otros coincidimos
y en el tiempo que vivimos,
por sus pasos se declaran.
Escrito en Febrero 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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