para hallarte, pues en mi pecho amante,
es continuo un pulso vibrante,
desde dentro, al sentirte y quererte.
Hoy me raptan tu cuerpo y tu aroma
y eres hoja, temblando en mis dedos,
deja al margen prejuicios y miedos,
vuela libre, pequeña paloma.
Y si acaso frenaste tu vuelo,
faltará ese aliento que exhalas
sobre mi, como dos grandes alas;
tu suspiro conforma mi anhelo.
Es por ti, por tu amor, que mi cielo,
hoy me muestras, traviesa y dichosa,
ya no busco otra luz, ni otra cosa,
que tu amor, como meta y consuelo.
Escrito en Agosto 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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