y afecta a lo cotidiano,
así, de primera mano
se va instalando en la gente.
Se produce la empatía,
cuando nos relacionamos
y al final nos implicamos
en esa filosofía.
Nos sentimos eslabones
de esa gran cadena humana,
que nos asocia y hermana
en varias proposiciones.
Irá a buen ritmo la vida,
si en la misma vibración,
palpita tu corazón,
como una llama encendida.
Pues, si prima el sentimiento
de hallar la buena armonía,
se ha de completar el día,
viviendo pleno el momento.
El saludo a las personas
que pasan por nuestra vida,
es esa justa medida
de una virtud que blasonas.
Vivimos amaneciendo
a una vida complicada,
que al final, se queda en nada,
cuando la vas comprendiendo.
Y aún, teniendo las respuestas,
venciendo toda la duda,
la vida de nuevo muda,
mostrándote otras propuestas.
Todo muda y se destruye,
tan sólo por la unidad
en la solidaridad,
con voluntad… se construye.
Escrito en Agosto 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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