que a la hoja, une en toda su existencia
y sabemos de la fe, más que de ciencia,
a pesar de divagar, estando solo.
Se sujeta la vida, en el instante
en que brota, porque ha sido concebida,
nadie supo en este tiempo su medida
y nos queda mucho trecho por delante.
La sujeta un fino hilo, o un sedal,
sumergido entre las aguas primigenias,
en su orilla, sólo crecen las gardenias,
como flor, que se prende en un ojal.
Se sujeta la vida, y sorprendida,
bien conoce su descenso con la edad,
porque el tiempo nos declara su verdad,
hacia una realidad desconocida.
Otro pulso en la existencia, que divaga,
por saber los entresijos del destino,
pues la vida, vas perdiendo en tu camino,
nada evita que en el tiempo se deshaga.
Sólo queda en nuestra fe, esa esperanza
de otra vida, más segura y duradera,
pues el tiempo no contempla nuestra espera,
cada cual baila en su vida con su danza.
Escrito en Abril 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario