que por amor llega a llenar un vaso
de angustias.
Un lamento es una voz que se ahoga
en la súplica que asciende por encima
de los ojos y busca respuesta
en un cielo nublado, con su semblanza en gris.
Un lamento es un eco
que intenta perpetuarse,
pero la piedra inerte y la tierra yerma,
absorbe su desgarrada pena y le devuelve
las flores de Estío.
Un lamento es la corriente que circulando
por el río de la vida, desemboca
en un tranquilo mar, que resuelve
su accidentado curso y sosiega su espíritu
en su seno.
Madre de abierta entraña, en cuyo útero
los seres viven, ahogando sus penas
en sus salinas aguas.
Escrito en Junio 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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