tu cabello es la corona,
que sobre mi cielo asoma
con la gracia de Sevilla.
Eso es una maravilla,
al igual que tu sonrisa,
tan suave como la brisa
o el tibio sol, cuando brilla.
Soy sólo un espectador,
que admirando tu belleza,
va llenando su cabeza,
de tu genio y tu candor.
Llevas la gracia y la sal
de toda Sevilla entera
y te quiero aunque no quiera,
para mi bien o mi mal.
Impregnas y das sentido
a mi vida, y mi embeleso,
te siento al igual que un beso,
cuando agitas tu vestido.
Escrito en Septiembre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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