brilla igual que el mismo sol,
pero tu alma es crisol
del sentimiento más bello.
Pues tu amor y tu ternura
tienen destellos dorados,
que en mi ser quedan grabados
al prenderme a tu cintura.
Si acaricio tu cadera,
mientras a tus ojos miro,
exhalo un leve suspiro,
sin advertirlo siquiera.
Voy respirando tu aliento
y en tu boca un dulce beso,
bebo con el embeleso
de quien sueña este momento.
Nuestro amor nunca declina,
brilla y en el corazón
nace una nueva emoción,
que brota y nunca termina.
Amor cálido en Invierno,
brisa fresca en Primavera,
que nuestra dicha no muera
y nuestro amor sea eterno.
Escrito en Septiembre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario