lunes, 27 de mayo de 2024

Vuestras son todas mis palabras.

De esta vida soy testigo,
sin más ambición, ni meta
que en mi alma de poeta 
dejar claro lo que digo.


Cada palabra, por bella 
debe tener la expresión 
más fiel a mi corazón 
y más profunda en mi huella.


Narrar aquello que gusta 
y escuchar el día a día 
cantando en la poesía 
también lo que nos disgusta.


De la verdad ser espejo,
donde ver en las acciones,
el sentido en las pasiones 
en un diáfano reflejo.


Plasmar lo hermoso y lo feo,
pues todo viene a formar 
nuestra forma de expresar 
el más oculto deseo.


A veces, se mira al cielo,
como queriendo alcanzar,
lo que no puede esperar 
y es fruto de nuestro anhelo.


No figura en los misales,
que la gracia concedida,
sea recompensa en vida
y somos tristes mortales.


Que, dentro del corazón,
perseguimos ese sueño,
que nace de nuestro empeño 
en aras de una ilusión.


El poeta es trovador,
pero su palabra es tuya,
a pesar de que construya
un verso con tanto amor.


Él bebe en distintas fuentes,
la palabra más sincera 
que va creciendo a la espera 
de regresar a las gentes.


El poema es la virtud 
de la palabra, que escrita,
nuevamente resucita 
triunfante en la multitud.

Escrito en Mayo 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



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