o desandar el camino,
ni se conoce el destino,
ni dónde va a terminar.
El hecho de caminar,
no basta en entretenerse,
nada puede detenerse
y no se debe esperar.
Detenerse es admitir
un ocio que nos limita
y en la aventura se excita,
nuestras ganas de vivir.
Escrito en Noviembre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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