es sin duda desdeñado,
porque no es aprovechado
y no parece importarte.
La vida se hace de instantes,
que merecen ser vividos,
si se pierden en tu olvido,
permanecerán distantes.
Queda un ejemplo delante,
de nuestras miras y espejo,
pues cuando llegas a viejo,
surgen los interrogantes.
¿Porqué no habré disfrutado
de aquel momento preciso?
¿Porqué no hice un inciso
y lo tuve atesorado?.
¿Porqué ese instante, no vuelve
y ahora surge su añoranza?
¿Porqué, dada mi tardanza,
en el tiempo se disuelve?.
Tal vez, vivir es guardar
esos momentos inertes,
cuando valoras e inviertes
un tiempo que atesorar.
Escrito en Noviembre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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