porque en ella hemos nacido,
campos de hierba esparcidos
en tallos de verdes ramas.
Brotes de verde inocencia.
que en nuestro paso ligero,
para sentirnos, primero
hemos de tomar conciencia.
Tierra en labor inminente,
que somos ave en el mar,
cuando queremos cruzar
lenguas de tierra candente.
Tierra al fin entre los dientes,
nacidos de la cordura,
tierra en nuestra sepultura
en un propósito ardiente.
Tierra de la que se nace
y en ella se va creciendo,
así lo siento y entiendo
en su vínculo o enlace.
Tierra de espina y abrojos,
de fértil grano y de miel,
del tono de nuestra piel
y un horizonte en los ojos.
Escrito en Junio 2017 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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