placentera y soportable,
por ser grata y agradable,
viviremos sin medida.
Nunca antes se pensaba,
que aún, en la excelsa dulzura,
la vida puede ser dura,
porque nadie se enfermaba.
Nadie jamás pensaría,
encontrar entre sí mismo,
un cruel metabolismo,
que al final lo vencería.
Pero has de saber, que hay mieles
que te pueden sorprender,
cuando alcanzan su poder,
disparando sus niveles.
Y todo se descompensa
en tu sangre roja y pura,
porque esa grata dulzura,
va menguando tu defensa.
Ante ti hay un nuevo reto,
luchar contra la glucosa,
que es la ninfa caprichosa,
con su cruel amuleto.
Que pierda todo su oficio,
que muy lejos de endulzar,
te crea ese malestar,
que se agrava en tu perjuicio.
Escrito en Noviembre 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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