todo se va conformando,
mientras vamos caminando
sobre la vida, aprendiendo.
Se aprende con la atención,
prestada a nuestros mayores
y ellos hacen los honores
al darnos una lección.
Si más se quiere aprender,
el mundo queda pequeño,
nadie en el saber es dueño
y eso hay que reconocer,
Ni aquello que has escuchado,
lo grabas en tu memoria,
si no es parte de una historia,
que, al fin, la has asimilado.
Todo se aprende a bocados,
con mordiscos muy pequeños,
varios intentos y empeños,
componen sus entramados.
Porque la filosofía,
forjada en el pensamiento,
no es la obra de un momento,
tampoco surge en un día.
Cada ser, que está naciendo,
tiene mucho que aprender
y también puede ofrecer
aquello que va sintiendo.
Descubriendo en su poder,
que todo tiene un sentido,
que no es un tiempo perdido,
lo que se pueda aprender.
Es escuchar y enjuiciar
que toda sabiduría,
te ha elegir ese día
que la puedas expresar.
Todos llevamos lo nuestro
de una lección aprendida,
que el discípulo decida,
convertirse en su maestro.
Escrito en Febrero 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario