hay un estruendo que emana de la duda,
cuando la razón se pierde
entre dilemas barrocos.
Huele a incertidumbre, con un ligero toque
de brea, que intenta cubrir todos los huecos
de la inconsciencia.
Se abren las puertas de lo absurdo
en las variaciones de un tiempo, que por su
inestabilidad, carece de una férrea firmeza
y acaso sea el motivo por el que,
la cal se deshace bajo una lluvia inclemente
de lágrimas ácidas.
Veo surcos en la existencia y cicatrices
en los recuerdos, cuando desesperamos
y no somos capaces de hallar la llave
de nuestra propia felicidad, que anteriormente
guardamos en uno de nuestros bolsillos.
El vacío es la ruptura que se produce, en el
tejido de los bolsillos de la consciencia,
porque dicha llave, ha horadado también,
todas las fibras de nuestra alma.
Escrito en Marzo 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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