y se mata o se descalabra
la belleza que hay en la palabra
y ha brotado desde el corazón.
Se le niega toda la atención
que merece nuestra poesía
y un agravio sufre cada día,
se la aparta a un oscuro rincón.
Soy consciente de que se avecina
una triste insensibilidad
y a la rima, con gran crueldad,
se la ignora y condena a la ruina.
El poema está en el abismo,
va perdiendo toda su expresión,
se le resta un matiz de emoción,
solamente por puro egoísmo.
El lirismo de toda belleza,
ha sufrido y ha sido dañado,
este siglo lo ha condenado
y en absurdas palabras tropieza.
Y es que acaso, nos falta intención,
de guardar el tesoro sentido
que el poema siempre lo ha tenido
en su máximo afán y expresión.
Se ha perdido el respeto y razón,
el sentido de todo decoro,
ya no estamos en el Siglo de Oro
y asistimos a su destrucción.
El poema es mi vida y mi abrigo,
soplan vientos terribles y helados,
los poetas somos olvidados,
¡Poesía, yo muero contigo!
Escrito en Junio 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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