La calma serena de tu rostro me atrae
hasta la ensoñación, hasta que la vorágine
de tus caderas, imprime un nuevo ritmo
a los latidos de mi corazón.
No puedo palparte, pues eres
un hermoso sueño, que temo que llegue
a desvanecerse, como espuma de mar
entre mis dedos.
Te amo secretamente en el sínodo
de mis sueños y no deseo despertar,
si no es a tu lado, Amor.
Escrito en Enero 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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