como granizo helado, estaré lejos, muy lejos.
Cuando desde tu mirada, surjan alfileres
hiriendo mis ojos y vuelvan los tigres del odio,
para devorar mi carne
y todas mis declaraciones
de amor inconcluso, estaré lejos, muy lejos.
Cuando pretendas arrestarme
entre tus brazos, con el propósito de hacerme
tu esclavo, estaré lejos, muy lejos.
Ataré con fuertes nudos mi pasado
y lo dejaré sumergido en el llanto, que un día
derramé por ti.
Volveré a la tierra, con gesto impávido,
a sembrar otra vida, desde mi cuerpo congelado en la disforia.
Cuando sienta deseos de retornar a la vida,
lo haré vestido de nácar, con un escudo de luz,
brillando ante tus ojos y ante los ojos
de un mundo sorprendido por la euforia
del vuelo de las mariposas, en una eterna
primavera de Amor.
Escrito en Enero 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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