que se vencen bajo el sueño,
en ese cruel empeño
de olvidarse de uno mismo.
La cárcel de hueso y piel,
el ser humano, redime
en un sueño, que le exime
del golpe de su cincel.
Pues la vida nos moldea,
aprisiona y atenaza,
en una grave amenaza,
sufrida, aunque no se vea.
Si acaso, no se percibe,
perdemos la voluntad.
¡ Volved la vista y mirad,
esa razón que describe…
Quien escribe y no desdeña,
saber que es un tiempo inerme,
que descuida aquel que duerme
y no, quien despierto, sueña !.
Escrito en Enero 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario