lunes, 30 de septiembre de 2024

Abrazar al mundo entero.

Quiero abarcar el mundo entre mis manos
y amarlo sin prejuicios, ni medida,
sintiendo una fuerte sacudida,
que nos una en un abrazo, como hermanos.


Disfrutar todo el amor, profundamente,
amando sin edad, ni consecuencia,
saber que es producto en mi paciencia 
la recompensa que hallo al ser paciente.


Quiero llenar el verbo con mi verso,
alzando en la escritura, la belleza 
que anida hace un tiempo en mi cabeza
y crece en el tapiz de mi universo.


Quiero vivir mi vida y de esta suerte,
saber que mi experiencia es merecida,
le da fervor, calor y nueva vida
y burla mi temor ante la muerte.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz “.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Imaginarte en un vuelo, con la libertad de amar.

Sentirme así, desleído en tu boca,
como caramelo o un terrón de azúcar que,
provoque una dulce sonrisa.
Apaciguar el tumulto de las olas, en tu marea
vertiginosa y apurar tu néctar sin temor 
a morder suavemente tu lengua o ser invadido 
por un deseo, más allá de lo permitido.


La mesura origina la calma que, se mece
sobre el tiempo retenido en tu regazo.
Anido en tu mente, poblando con mi dicha 
el volumen indefinido de tus pensamientos.


Sentir, sólo sentir sin preguntas, ni respuestas.
Rozar tus senos redondos con mi aliento 
e imaginar los pétalos que se desprenden 
desde tu corazón.


Abro la espita, por donde salen tus suspiros 
y una vez más, beso tu boca en el borde justo 
de tus labios.
No consigo adivinar tus pensamientos,
pero llevo en mí escalofrío, la vibración 
de tu ser y alzo el vuelo contigo, para prender 
una estrella sobre tus cabellos.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



El peso del Egocentrismo.

El lastre que se arrastra, egocentrista
se vuelca hacia el fondo, en la inconsciencia,
nos pesa sobre el alma y la conciencia,
muy lejos de la calma que equidista.


Así que, de esta forma sólo intuyo,
que no tendrá lugar su vencimiento,
sí ignoras, por desconocimiento,
que el peso en su razón es por orgullo.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Un mar que sueña amaneceres de esmeraldas.

El mar babea espumas al besar las playas.
Inmenso en su lágrima de sal y de constancias.
Brevedad de lunas sobre el horizonte 
y sepulcro de aguas, entre la incertidumbre 
de las olas, en su perpetuo vaivén.


Apenas, un labio que crece en la nostalgia
y se derrama sobre las arenas del tiempo.
Se pierde en el horizonte, como un límite 
que no se comprende en la esférica totalidad,
aún no resuelta, aún no declarada.


Vastedad en la superficie y profundidad 
o misterio, en un seno de cóncavos recuerdos 
o naufragios perennes de la razón.
Aguas oscuras y abisales que emergen 
 a la superficie, bebiendo la luz en sus reflejos 
cristalinos.

Lengua muda en el murmullo y suspiro 
ondulante que, el viento peina y escucha.
Sintaxis escrita sobre las emociones y calma
resuelta en la meditada contemplación 
de su cuerpo verdinegro o azul intenso 
bajo la carpa de un cielo que acaricia 
su superficie, mientras duerme o sueña 
amaneceres de esmeraldas.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




domingo, 29 de septiembre de 2024

A mi amigo Pascual Molongua.

Rey mago de la ilusión,
una voz por excelencia 
y su bendita prudencia,
por la fe en su religión.


Amigo de sus amigos 
por un tiempo atemporal,
fuerte ante el temporal,
las calles son sus testigos.


Las calles, antes vacías,
con su voz se van llenando,
mientras él sigue entonando 
las más bellas melodías.


Recorriendo los rincones 
de Bilbao y el Casco Viejo,
canciones de un tiempo añejo,
vibrando en los corazones.


Eco en la profundidad 
de este bardo y su canción,
muy grande es su corazón 
y más grande, su verdad.


El eco de un alma inquieta,
que vaga por este mundo,
con un acento profundo 
y una visión de profeta.


Bilbaíno de adopción,
pues fue el destino el que quiso,
que asumiera el compromiso 
de compartir su ilusión.


Bilbao lo acogió en su seno,
Pascual no puede faltar,
pues es el rey Baltasar,
en la piel de un hombre bueno.


Florece en su devoción,
esa canción que dispensa,
como premio o recompensa 
y suena como oración.


En este tiempo actual,
tu voz es la bendición,
que nace en tu corazón,
querido amigo, Pascual.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






sábado, 28 de septiembre de 2024

La pérdida del estado puro en el ser humano.

Quien conoce la inocencia, conoce el estado 
puro del ser humano.
un alma sin fracturas y una conciencia limpia,
antes de llegar al desorden producido 
por la ambición desmedida y los vicios,
generados por los apetitos.


Esto ocurre, cuando ya nada se espera 
e intentamos llenar nuestros vacíos 
con objetos inútiles.
Se pierde la consciencia del mundo en la fe
y en el combate, perece lo mejor de nosotros mismos.


En la soledad de la noche se extravían 
nuestras mejores intenciones 
y entre sombras, emergen los fantasmas 
de nuestros peores temores.


No supimos que éramos libres y permitimos 
que fuéramos esclavizados en una cadena que, nosotros mismos forjamos.
Incapaces de observar nuestra imagen 
real en todos los espejos de la vida,
rompimos en pedazos, el frágil cristal 
que nos unía a nuestra auténtica realidad.


Errantes en la inconsciencia y merecedores 
del mal que exprimimos en nuestras almas,
por nuestros bajos instintos.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





viernes, 27 de septiembre de 2024

El poeta vuela entre sus estrofas.

Sin ser ave, con su pluma 
inicia sus grandes vuelos,
son frutos de sus anhelos,
sus sueños de blanca espuma.


Surge en su mente otro tema,
porque la vida es variada 
y la siente derramada
en estrofas de un poema.


El poeta, en su locura,
halla en la vida un sentido,
que tal vez se haya perdido 
en el fulgor de su albura.


Él vive por la belleza,
que, sintiéndola recibe 
cada estrofa que se escribe 
y que anida en su cabeza.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz “.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




En el otoño de nuestras vidas.

Como gotas de lluvia bajo el viento,
nuestras vidas, sin cesar se precipitan,
hay motivos y experiencias, que la excitan 
y se imprimen con los hechos, en momentos.


Se derraman sobre el tiempo, cual la arena 
que se esparce lentamente en el desierto,
ante ese sin vivir, precario, incierto,
gobernado en el dolor, por nuestra pena.


El quejido en nuestra vida es la impaciencia,
que tenemos al buscar el resultado 
de las obras, que en su día han comenzado 
por el fruto del tesón en la paciencia.


Como hojas del otoño, desprendidas,
que tapizan nuestro suelo en la constancia,
los destinos tienen esa relevancia 
que les dan nuevo color a nuestras vidas.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.  




jueves, 26 de septiembre de 2024

Los verdaderos monstruos.

Sujetos hay, que faltos de memoria,
cometen sin cesar nuevos errores 
y el tiempo es el testigo, en los horrores 
que quedan para siempre en nuestra historia.


No quieren navegar cerca del puerto 
ni quieren recordar donde han nacido,
después de cada crimen cometido,
entre el hedor que exhala tanto muerto.


Horrores como éstos, nunca viste,
son propios de una mente retorcida,
que restan validez a toda vida
y no valdrá decir que es un despiste.


No basta declarar, que una intención 
es buena, si es fatal su resultado,
sucede que, jamás se ha meditado,
el hecho de buscar la solución.


Perversos en un mundo enloquecido,
gigantes del terror y la ambición,
vacíos en su mente y corazón,
porque en su evolución… ¡Ya se han perdido!

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.








Todo pasa en un suspiro.

En un suspiro, la vida pasa
y no pensamos en el futuro,
el tiempo es hábil, nada es seguro 
para el que triunfa o el que fracasa.


En un suspiro, cambia la suerte,
porque al final, nada está escrito 
y las riquezas, no necesito,
pierden valor, tras de mi muerte.


En un suspiro se apaga un beso,
entre los labios enfebrecidos,
besos que quedan enmohecidos,
ninguno queda en el labio impreso.


En un suspiro que no se nota,
pasa la vida, no se detiene,
marcha desnuda, igual que viene 
y entre recuerdos su tiempo agota.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





miércoles, 25 de septiembre de 2024

La rutina mata al amor.

Me acostumbré a disfrutar 
de tu beso y de sus mieles,
al contacto entre dos pieles
y a la brisa de la mar.


A la caricia y ternura 
y a una mirada profunda,
a la senda vagabunda 
y al vértigo de tu altura.


A sentirte siempre al lado,
entre sábanas de espuma,
para hallarte entre la bruma 
con nuestro amor desgastado.


Volviendo a ti, mi mirada 
y guardarte en un suspiro 
en justo y exacto giro,
con mi alma hacia ti entregada.


Ahora lo echo de menos,
pues no bastó el embeleso,
quedó perdido en un beso,
fueron unos tiempos buenos.


No queda fuego que alumbre
 sólo nos queda un intento,
no basta decir: Lo siento,
si se trocado en costumbre.


Las costumbres, se examinan,
y matan nuestros deseos 
de amar, porque estos bloqueos,
finalmente nos lastiman.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.


© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.







La vida es sueño.

Como el agua en su reflejo,
una mirada arrebata
tu atención y se delata
en el brillo de su espejo.


Un poema y cantos viejos 
brotan desde el corazón 
y un suspiro de emoción,
se escuchará desde lejos.

Su cristalina pureza, 
tiene tal intensidad,
que al mirarte, va estallar 
en pedazos tu cabeza.


En la mesura del tacto,
buscarás su cercanía,
no sólo su compañía,
sino también su contacto.


El sentimiento muy dentro 
va calando y se desea
una actitud que prevea
la magia de un nuevo encuentro.

Sintiendo desde tu anhelo,
llegar a tocar su alma,
muy lentamente y con calma,
en tu ascensión hacia el cielo.


Vivir, amar y soñar 
en plenitud su expresión,
dentro de tu corazón,
soñar y no despertar.


Pues en tu mágico empeño,
se convierte en realidad 
el fruto de su verdad,
pues la vida es sólo un sueño.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




lunes, 23 de septiembre de 2024

Toda la Música.

Arpegios que en la voz modulan,
la música que en el alma nace 
y el sentimiento subyace 
en la armonía que emulan.


El sonido es trovador,
de un amor que se declara,
como agua límpida y clara 
o el canto de un ruiseñor.


Siete notas concluyentes,
que ascienden al pentagrama,
cinco líneas y un programa 
de armónicos adyacentes.


La música es bendición 
de una voz, que magnifica,
aquello que dignifica 
toda una composición.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




El silencio marca la cadencia musical.

El silencio es la atención,
que la música en progreso,
va disfrutando del beso 
y el ritmo de una canción.


El silencio es musical 
en la pausa y ese espacio,
que va ocupando despacio,
una pieza original.


El silencio es la belleza 
de la pausa en el sonido,
para prestar al oído,
cadencia en su ligereza.

El silencio da su lustre 
a toda composición,
pues, preso de la emoción,
todo sonido es ilustre.


La música es disfrutar 
del silencio y del sonido,
en ese tiempo perdido,
que se gana al escuchar.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Diferentes criterios y opiniones.

Me lleva un tiempo encontrar 
respuestas a mis preguntas,
porque en algunas consultas,
se puede tergiversar 
lo que la mente interpreta,
pues falta la claridad,
que dé luz a la verdad,
de forma real y escueta.


Entonces, es conflictiva
la solución que resulta,
en torno a esa consulta,
lejos de ser asertiva.


Eso, sin duda motiva
entrar en la confusión,
al buscar en la razón,
una respuesta más viva
que se aprecie y satisfaga 
en todo razonamiento,
la estructura y fundamento,
para que no se deshaga
el criterio que se forma,
cuando creemos saber
lo que pueda acontecer,
en nuestro juicio y su norma.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




domingo, 22 de septiembre de 2024

Las maldades por envidia.

Hoy me envuelven de nuevo esas sombras,
de tristeza, que en el llanto se contienen
y me arrastra hacia el fondo, mientras vienen
con la envidia, que declaras y no nombras.


Tu vileza es de un ser mediocre y ruin,
que no sabe descubrir en su valor,
sentimientos de amistad, por un amor 
que debiera perdurar siempre hasta el fin.


Ese impulso que se muestra en tu vileza,
no consigue desatar ningún rencor,
es más bien, por esa ausencia de tu amor,
que produce malestar en mi tristeza.


Sobrevivo a las maldades por envidia,
no comprendo ese tropiezo en tu peldaño,
cuando sabes que jamás yo te hice daño 
y me duelen tu amargura y tu desidia.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




sábado, 21 de septiembre de 2024

Los Maestros de la vida.

El tiempo me desgasta y me aconseja,
basándose sin duda, en la experiencia,
la vida lleva en sí, su propia ciencia,
no admite en el dolor, ninguna queja.


Maestra de la vida, es la experiencia,
con ella se consigue entendimiento,
también es buen maestro el sufrimiento,
requiere más valor y más paciencia.


Maestros de la vida, se suceden,
enfocan todo su conocimiento,
nos muestran su saber, en su momento
y un tiempo necesario nos conceden.


El tiempo me desgasta día a día,
pero voy aprendiendo, paso a paso 
a no sentir temor, frente al fracaso,
la vida tiene su filosofía.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





La ciénaga más grande del mundo.

Asisto con pena y desolación a la degradación 
del género humano.
Con su volumen de mentiras, traiciones y egoísmo, 
como un ave ciega se estrella 
contra los escollos de los arrecifes, en pleno 
vuelo.


Vuelo corto de alas recortadas, por su incapacidad de ascenso 
y el sobrepeso de sus temores.
Se precipita en una ciénaga, sumergido 
en sus propias heces y no sabe salir 
de sus propias miserias.


Critica el comportamiento de otros que,
como él, defecan en la misma ciénaga.
Sólo le preocupa la compra- venta del honor
y la integridad a bajo coste, mientras
 sus cuerpos y sus almas se van hundiendo,
descuidando su ánimo en la comprensión 
de todo lo que está sucediendo ante sus ojos.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




viernes, 20 de septiembre de 2024

La Mediocridad.

Quiero hallar una respuesta 
ante la mediocridad,
que disfraza la verdad
con una absurda propuesta.


Quiero denunciar la altura 
del techo, en la incomprensión,
ante tanta sinrazón 
con su frágil estructura.


Que tiene su envergadura 
por la falta de empatía 
y se agrava cada día,
porque así no se madura.


La vida que se plantea
es esa falta de pulso 
de un celebrado discurso,
que se escucha en la platea
de este teatro del mundo,
que va cerrando el telón,
su deplorable función 
es un fracaso rotundo.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





El espanto de vivir.

El espanto de vivir es el señuelo,
que nos pide por la fe, nuestro perdón,
yo no sé, si es la condena o redención,
para hallar nuestro destino, allá en el cielo.


El espanto de vivir es la condena,
si dejamos a los nuestros bajo tierra,
ocultando el hedor de tanta guerra,
entre lágrimas subyace nuestra pena.


El espanto de vivir, por la codicia 
nos conduce a un sufrimiento inagotable,
preferimos la mentira y que no se hable,
porque no podemos ver tanta inmundicia.


El espanto de vivir es no admitir
que en la vida no nos sirven los honores,
cuando tienen potestad nuestros temores,
en la lucha al intentar sobrevivir.


El espanto de vivir es observar 
que actuamos con maldad, como rapaces,
lo olvidamos, porque no somos capaces 
de lograr un sólo intento para amar.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






jueves, 19 de septiembre de 2024

Voces del espíritu en el vacío del silencio.

¿Cuál es el secreto del ánima, que deja 
en su ausencia, una nota suspendida
 de su voz, en el silencio?


¿Cómo acceder al misterio que guardan
los silencios, que huyen del bullicio del sonido
en la precariedad de su armonía?


Álgida voz, la que pronuncia un himno
o una queja con una constancia en su lamento.
Se adecúa el silencio en la calma 
de una mente tortuosa, para abarcar
 ese espacio perdido en la inconsciencia 
de las edades.


Ondas de sonido y agua fértil, en el interior 
de un corazón ilusionado.
La voz y el sonido, son el precinto personal 
del espíritu innato, que pretende dejar 
aparte, al nómada que habita 
en los pensamientos.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”. 




Paisaje de un pueblo de leyenda (EuskalHerria)

Vertientes enconadas en desfiladeros,
gargantas ávidas del agua del rocío,
bajo un inclemente sol, que erosiona la piedra 
con el cálido soplo de un viento estival.


Hermosa la vida que queda sostenida 
al borde del vacío.
Propagación del ánimo hacia un temor invisible, pero auténtico y real.


Abismos como dudas, en la profundidad 
del pensamiento y un verde liquen que subyace
 en la humedad del haya y las hojas
de roble tapizando el suelo otoñal.


La magia está en el aire, flotando 
sobre el humo de las chimeneas 
de los caseríos.
Llueve y Basajaun avisa al pastor con voz
de trueno, de una inminente tormenta.


Un rayo provoca un haz de luz con su espada 
flamígera y con temor nocturno, se narran
viejas historias, al calor del fuego del hogar, 
mientras las sombras, dibujan espectros 
sobre las paredes.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




miércoles, 18 de septiembre de 2024

Muy a pesar vuestro.

Me golpea la vida sobre la vastedad 
del espíritu.
La esperanza se retrasa en su cita,
con la comunión de ideas que siempre 
flotaron sobre el seno de mis pensamientos.


Hoy veo marchitarse la flor que, celosamente 
he cultivado y la soledad avanza 
con paso firme, para convencerme 
de quien soy, a pesar de todo.


A pesar de las voces que intentan callarme 
y negar mi realidad, mi sino y mi circunstancia.
Errante soy en un camino de sombra y luz,
sobre las edades inertes, que se pierden 
en el olvido.


Me gusta adivinar imposibles y recrear 
en la ausencia, todas las vivencias que tuve 
en el pasado, mucho antes de concebir 
la incertidumbre de mi futuro…
Muy a pesar vuestro.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




El tiempo pasa inexorablemente.

Avanza el tiempo en el ritual de las hojas
desprendidas, ante la inercia de las nubes que
contienen, todas las lágrimas que se perdieron 
en las guerras.


En el ocaso de la vida, existe una tristeza 
que pesa y se condensa en la nebulosa que
emerge del pensamiento y asciende 
como una promesa que no desea 
la forma propuesta, ante el resultado 
de un posible y efímero proyecto de vida 
o un intento de esbozo con mano temblorosa,
que apenas sostiene el cayado, con la firmeza 
necesaria que exige el protocolo 
de una juventud diluida entre marchitos 
recuerdos.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Somos el resultado de… ¡Tantas cosas!

Somos el resultado de un destierro 
de luz huidiza, en los recodos de las sombras.
El bárbaro lamento enmudecido 
en la precaria noche, ante la amenaza 
de un incierto amanecer.


El eco de una voz sin nombre, que intenta 
proclamar su exigua forma y la redondez
que escapa a la agudeza de los vértices 
de las palabras.


Somos el polvo macilento que, en las aguas 
se diluye con un tiempo inexorable.
Un atavío de suspiros que, difícilmente 
se sujeta en un pecho abierto, 
hacia el abismo que una boca descubre entre sus dientes.


Un abrazar imposibles, entre una lágrima 
que se seca entre las hojas amarillentas 
de los recuerdos.
Una memoria en la vastedad de un desierto 
y una sed de agua, cuando la boca 
no emite ya, el sonido diáfano de las palabras 
que aprendimos con la dificultad inherente,
en la primera etapa de la infancia.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




martes, 17 de septiembre de 2024

De la soledad a la comunicación.

En última instancia visito 
mi soledad aceptada,
después de todo, no hay nada 
y así nada necesito.


En el pentágono inscrito 
sobre mis manos vacías,
se van pasando los días 
de este poeta proscrito.


Nunca he pedido una enmienda 
a lo que pienso y medito 
y en este mundo maldito,
espero que se me entienda.


Si no encuentro comprensión,
mi previsión se habrá muerto,
predicar en el desierto,
conduce a la depresión.


Podrás poner tu intención 
y toda tu verborrea 
en todo lo que se crea,
mas, no es esa tu misión.


Se basa en la comprensión,
y al abrir tu mente clara,
en la razón se declara 
toda comunicación.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



El lirismo del Amor.

No se puede describir 
el amor en un momento,
tan grande es el sentimiento,
que sólo queda escribir.


El poema en su expresión,
trata de forma inocente 
lo que guardas en tu mente 
y anida en tu corazón.


Esa loca sensación,
en nuestra vida trasciende,
no se explica, ni se entiende
y motiva una obsesión.


Cuando estás en soledad 
y sientes que no ha llegado,
te encuentras tan desolado,
que dudas en realidad.


Pero sigues en la brecha,
con la ilusión de encontrar 
un amor que incinerar 
en tu corazón, su mecha.


Se produce una explosión
y sabes que lo has sentido,
por un beso y su estallido,
que son una bendición.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz “.


© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



Hablemos con discreción.

Discretamente te cuento,
la actitud es virtuosa
y en la discreción honrosa,
lleva el mejor fundamento.


Así pues, ya no concreto,
pues en mi disertación,
llevado por la emoción,
puedo pecar de indiscreto.


Un sabio dijo una vez,
que es mejor poder callar,
que tener que lamentar 
no haber contado hasta diez.


Pues la virtud de la boca 
es saber guardar silencio,
observar lo que presencio,
si en un error, se equivoca.


Un pensamiento se funde 
en la palabra postrera,
sí la mente no se entera,
se trastorna y se confunde.

Es bueno reflexionar 
antes, lo que has de decir,
no vayas a maldecir 
lo que intentaste expresar.


Lo que hay en tu corazón 
y conservas en tu mente 
es el verbo incandescente 
que fluye en ebullición.


Por eso lo más prudente,
sin duda es la introspección,
que guarda en tu discreción,
un criterio inteligente.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






lunes, 16 de septiembre de 2024

Cierro un paréntesis al besar tus labios.

Me estremezco y vibro, amor en cuarto creciente.
Me anego en tus puras aguas, de sentimientos 
que fluyen hasta mi corazón hendido 
por un beso, una flecha o un suspiro 
de tu boca.


Tu cuerpo, territorio inexplorado, selva virginal 
que mis dedos recorren palpando tus secretos 
y una vez más, me adentro en el misterio 
del templo de tus placeres más recónditos.


Irisación de tus aguas, por soles de luz 
crepuscular, que desde tus ojos esplenden.
Ámbito todo de ternuras hacia los cielos 
soñados, bajo la tortura de una espera,
que retiene un corazón, a punto de saltar 
hasta tus lindes.
Cierro un paréntesis al besar tus labios.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




domingo, 15 de septiembre de 2024

El mestizaje de los recuerdos.

Locamente busco el cierzo 
en este frío paisaje,
en que abunda un mestizaje,
con un declarado esfuerzo.


Amalgama de colores,
en un otoño cercano,
que llevamos de la mano 
de pretéritos amores.


Recuerdos que, divagando,
aparecen fantasmales,
en todos los ventanales, 
que ahora mismo voy cerrando.


Invierno sobrecogido 
en las hebras, que aventadas,
nuevamente recobradas,
rescatamos del olvido.


Cuentos sobre el edredón 
de muchas de las vivencias,
que, entre viejas experiencias,
buscan nuestra aprobación.


Invierno en la senectud,
recuerdos que dejan huella 
y aunque nuestra vida es bella,
formaron nuestra inquietud.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Cuando una decisión es sabia.

Siempre hay un intento breve 
por cambiar a un rumbo nuevo 
y he de decir…y me atrevo,
que lo cambia quien se atreve.


No importa la dirección,
lo que importa es el camino,
nadie sabrá del destino,
pero si de su intención.


Se encuentra en esa ocasión,
en que el pulso se decide, 
sobre ese punto que incide 
entre la duda y razón.


Y aún, en la incertidumbre,
la aventura es emisaria 
de una actitud necesaria,
que en su visión nos deslumbre.


A cada paso, un intento,
una nueva perspectiva,
que nos parece atractiva,
al disfrutar del momento.


Pues la suerte es la intensiva
forma, de una novedad
y su imagen, en verdad.
será la definitiva.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




A un futuro nacimiento.

Un pulso, golpe o latido,
corazón enaltecido 
y el brillo de la emoción 
con la fe y la devoción,
que, al amar cobra sentido.


Una chispa decidida 
de donde brota una vida,
que espera su nacimiento 
concebido en el momento,
al expandir un retazo 
de un anhelo en su regazo,
que como matriz, genera 
toda la expresión primera
que cultiva en su interior,
una semilla de amor.


Amor, vida y esperanza 
para vencer al ocaso 
sin un temor al fracaso 
en la alegría que danza,
en el camino seguro 
de un nacimiento futuro.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Algunos escasos recuerdos.

Ya no quiero recordar 
lo malo que haya vivido,
he de dejarlo en olvido 
para poder caminar.


Con la frente bien dispuesta 
en lo que debo de hacer,
pues a cada amanecer,
nace una nueva propuesta.


Lo que atrás hemos dejado,
se ha de perder, por ausente 
y es ahora, en el presente,
cuando se olvida el pasado.


En el pasado, su sino,
se diluye en la corriente,
que arrastra el tiempo presente,
como el agua en un molino.


Sólo guardo en mi memoria,
ese momento fluido,
después de haber construido 
un pasaje de mi historia.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




sábado, 14 de septiembre de 2024

El riesgo en la aventura de vivir.

En este mundo, sólo el arriesgarse,
motiva una aventura que se espera
y es una decisión que, si es sincera,
termina por gustar el implicarse.


En esta situación, crece y perdura 
la sensación de hallar, que todo vale, 
si algo va muy bien y todo sale,
es cuando se disfruta la aventura.


Nadie conocerá la arquitectura 
del riesgo que se ve en el pensamiento,
basado sobre un sólido argumento,
que vamos a gozar con cierta holgura.


Una cosa es saberla previsión,
que siempre se tendrá ante la duda 
y otra es el observar que todo muda
formando un espejismo en la ilusión.


Mas, la aventura es el existir 
y valorar el riesgo que conlleva,
es por tu voluntad, que ésta te eleva 
hacia otro plano, digno de vivir.


El riesgo se delata en la consciencia 
y la aventura es riesgo que, asumido,
confirma en su firmeza, haber vivido 
al máximo nivel de la experiencia.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





La vida es emocionante.

Cada día hay un motivo 
para celebrar la vida,
bien está que se decida,
alegrarse de estar vivo.


De saber que hay un lugar 
en tu corazón inquieto,
que se basa en el respeto, 
cuando se comienza a amar.


Que el dolor es pasajero 
y la alegría se instala,
que la tristeza no es mala,
te añoro, porque te quiero.


Y es esa melancolía 
la que permite que vibre
y hace que me sienta libre
con la intensidad del día.


Que todo, por asumible,
tiene cabida y espacio,
para disfrutar despacio 
de ese tiempo incombustible.


Que anida en tu corazón,
porque vivir es gozar,
amar, sentir o llorar,
pues la vida es emoción.


Cuando tu alma se emociona,
se vive en la intensidad
de tu propia realidad
y te haces mejor persona.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





viernes, 13 de septiembre de 2024

Nictofobia.

Todo el amor del mundo 
se basa en esa embriaguez,
que sucede alguna vez 
y surge en lo más profundo.


Todos los cabellos vuelan,
al desprenderse a menudo,
de ese cuero cabelludo
y entre sueños, se desvelan.


En el ático, la lumbre
produce los fantasmales
espectros, en ventanales,
sin una luz que me alumbre.


El miedo, la sombra ingente,
que se cierne en el nocturno 
pavor, lento y taciturno,
con dudas sobre mi mente.


Caminamos en la sombra 
de un sortilegio o hechizo,
que en la noche se deshizo
y por temor, no se nombra.


Aciago pulso y mirada 
perdida en la sombra leve,
debes contar hasta nueve 
y en el diez hacer parada.


Todo temor, así huye 
del ámbito tenebroso,
amanece un día hermoso 
y tu inquietud se diluye.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






Razona el remedio, no tires por la calle de Enmedio.

Nadie ve la solución 
propia a su entendimiento,
cuando surge el sufrimiento 
dentro de su corazón.


Es conocer la ocasión,
en qué se debe tomar 
la decisión de luchar,
poniendo toda intención.


No hay mal, que cien años dure,
ni una voluntad airada,
cuando la vida es quebrada,
no hay nadie que lo asegure.


No es casualidad, que augure,
que todo tiene remedio 
y por la calle de Enmedio,
no es decisión que madure.


Es por esa introspección,
cuando se encuentra el camino,
que decidirá el destino 
con la mejor solución.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




El enigma está en ti.

Quieres hallar el secreto de la vida, 
fuera de tu ámbito te olvidas de que 
el mayor enigma, se encuentra en tu interior.
Lloras desesperadamente y piensas que,
el dolor y el sufrimiento se hermanan 
en tu vida.


Un instante puede tener más valor 
que ese dolor que acude puntualmente…
de vez en cuando.
la voluntad llega hasta donde la consciencia 
es capaz de abrir caminos,


El terreno, aunque pueda parecer árido,
puede ser cultivado, arañando la tierra 
con las mismas ganas que tus manos,
se crispan impotentes ante el dolor.


Nada es eterno, sino tu alma 
y la fuerza interior, que debe ser rescatada
y empleada, para vencer los vientos adversos,
que surgen en las tormentas de la vida.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




En busca del arcoíris.

Llevarte así, de la mano.
Abrir los senderos, los cuerpos inermes
de blanca ternura, en la compasión del oído que,
 atento escucha en la bendita misericordia 
de un fluido abrazo.


Como un único hermano, en la salvedad
de un mundo gris, cuyos colores se hallan 
en el arcoíris y para encontrarlos, debemos 
prudentemente, elevar los ojos al cielo.


La lluvia limpia los cuerpos y las almas.
La tierra sedienta, abre su garganta 
desde la entraña y de nuevo el sol la besa 
cálidamente, extendiendo sobre el cielo 
un arcoíris.


Así, de la mano, como perdidos en la niebla,
buscando la lágrima pura de la mañana,
en el rocío.
Tú y yo, diciendo sin palabras lo que ya sabemos, 
conectando con otras realidades que, emergen desde el fondo,
 para anidar en el corazón y en la mente.


Tal vez, aves solitarias que no desean emigrar 
a otras tierras, donde el frío invernal,
es perenne en el ánimo de las personas,
carentes de sentimientos, ya que fueron 
abandonados en los abismos 
de su inconsciencia.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz “.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.







jueves, 12 de septiembre de 2024

La penumbra es llama en tus ojos clarividentes.

En la penumbra de tus ojos clarividentes,
encuentro la llama necesaria, para encender 
la hoguera de mis olvidadas ilusiones.
La noche toda está inscrita, dibujando 
las órbitas de las estrellas, en el círculo 
perfecto de tus labios, durante un prolongado 
beso.


En el espacio delimitado, entre mis anhelos 
y mi corazón, dulcemente invadido 
por tus brazos, encuentro un cielo, 
en cuya vastedad se pierden
 mis pretéritas angustias 
y en icónicos despertares con brillante
resolución, mi alma se anega de amor 
con dulce premura.


No soy yo quien canta, es la emoción 
que se desborda en la mudez, 
ante la inquietud que produce el destello 
de una sonrisa, esbozada por unos labios carmesí.


No soy yo quien canta, es el azogue 
de mi alma, que suena con celestes arpegios,
emulando el tono de tu voz, en la caricia 
de su cadencia.
Es ese recorrido sobre la columna vertebral,
que me hace estremecer, cuando tu mirada 
descerraja todos mis temores.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



 

En una tarde fría de otoño.

En el letargo de las horas, las luciérnagas
encienden su luz, iluminando los sueños 
más recientes.
Los muros que te guardan cuentan historias 
pasadas y la hiedra cubre todas las palabras 
sin sentido.

El viento arrastra sus temores sobre las hojas 
secas del otoño, con un soplo helado,
ante la esperada visita de un invierno 
de cabellos plateados.
La verticalidad de los álamos contrasta
con las mágicas agujas del ramaje de los hayedos, que dormitan bajo el húmedo musgo.


El río, enajenado en su helado cauce,
permite que las lamias sobrevuelen su curso,
llevando sobre sus cabellos, sus peinetas
doradas, con sus reflejos solares 
de polvo macilento.


Sobre los espejos del agua, la luna resbala 
su cuerpo esférico y su desnudez
 queda oculta, tras la densidad de una niebla,
que se recorta entre las ramas de los árboles 
hirsutos y silentes.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




miércoles, 11 de septiembre de 2024

La aldaba de la invención.

En más de alguna ocasión,
suena muy fuerte la aldaba 
y aunque ya no se esperaba,
surge una nueva invención.

Un relámpago en la mente,
por su extrema claridad,
encuentra una realidad 
que se muestra diferente.


Otra forma de vivir,
otra forma de actuar 
y un tesoro al encontrar 
un sentido al existir.


Frente a tus ojos se muestra,
lo que antes no se apreciaba,
tal vez, porque se ocultaba 
en una forma siniestra.


Pero la sabia intuición,
esclarece por sus hechos,
los hallazgos satisfechos
en toda demostración.


Así nace de la nada,
esa creación innata,
que a la mente la arrebata,
por ser genial y esperada.


Dentro de tu corazón,
de tu ánimo y de tu mente,
un relámpago incipiente,
es la aldaba en la invención.


Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz “.
(dedicado a Nikola Tesla).

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Una hogaza de buen pan de vida.

Como el pan de blanca harina,
que crece en la levadura,
en nuestra breve andadura,
todo lo que nos fascina 
en el crecimiento humano,
lo tenemos tan a mano,
que nunca lo percibimos 
y muy poco conseguimos,
si falta la voluntad 
de poner en la intención,
todo nuestro corazón.


Pan somos y moldeamos 
la vida que nos han dado,
abre la llave el candado 
de todas las experiencias 
y así tomamos conciencia
de que nuestro crecimiento,
no se debe a ese momento 
único de inspiración,
sino a la consecución 
de nuestra obra en la vida.


En esa justa medida,
la harina de la tahona,
convierte a toda persona 
en el pan, cuyo alimento 
es del alma su sustento 
y el carácter que se amasa
en el amor y el respeto,
deja al espíritu inquieto
una emoción que rebasa 
toda nuestra comprensión,
porque este pan, en cuestión,
es rico y de buena masa.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



Pasemos a la Acción.

No acaba lo que no empieza,
se queda en compás de espera,
nada evita que se muera,
se desmonta pieza a pieza.


Toda acción, por su importancia,
se realiza en el presente,
porque el mañana está ausente 
y hoy tiene su relevancia.


Si dejas para mañana,
lo que hoy puedes dejar hecho,
nada te saldrá derecho,
porque no te da la gana.


No basta con la intención,
se requiere del momento,
en que por su fundamento 
se ha convertido en acción.


Por esta acción, se traslada 
la idea, que concebida,
a un proyecto le de vida,
en la obra realizada.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



martes, 10 de septiembre de 2024

Nada somos, ni tenemos y en el camino coincidiremos.

No se trata de servir, ni de que te sirvan.
Se trata del camino que recorras, se trata
de llevar la vista al frente. De no herir, ni ser
herido, a ser posible.


De llevar sobre los hombros, una vida
que pueda llegar a ser imprescindible.
Se trata de morir, cuando haga falta y a falta 
de un mejor plan, no necesita morir el que 
resucita cada día, a lo largo del camino,
si bien nadie conoce su destino,
tampoco se sabrá, por consiguiente,
lo que nos pasará al día siguiente.


Se cuenta sin hablar, toda una gloria.
Se narra espacios breves, con simpleza,
aquello que se tiene en la cabeza.
Se olvida el olvidar y en la memoria,
se borrará tu paso por la historia.


Nadie recordará tu mano amiga,
nadie te hará un póstumo homenaje,
te irás como has venido y tu equipaje,
serán todos tus huesos descarnados.


Aquello que has perdido o has ganado,
jamás será un motivo de disputa,
la muerte no discute, es absoluta,
será su decisión frente al finado.


Al fin nada te llevas, tu riqueza,
será un juguete más, juguete vano,
que pronto lo verás en otra mano,
que te lo quitará con ligereza.

Escrito en Septiembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.