es un lapsus en la memoria.
Ayer fue el musgo de hoy
y se forman líquenes, en el vacío
que queda en el alma.
Ayer te soñaba envuelta
en sábanas de seda y tules
de sombras cálidas,
que deambulaban perdidas en la noche,
buscando vestir tu cuerpo.
Hoy es la pétrea soledad, el amargor
de despertar con la huella de tu cuerpo
en el lecho y vestirme de alegrías,
para disfrazar mis ausencias,
aparentando no estar desnudo,
una vez más...sin ti.
Escrito en Julio 2017 por Eduardo Luis Diaz Expósito."zuhaitz",
No hay comentarios:
Publicar un comentario