domingo, 29 de junio de 2025

Hacia el horizonte de un nuevo día.

Una luna oronda, de pan reciente, brilla
en la oscuridad de la noche, y ésta desaparece 
entre los dorados cabellos del alba.


Las magnolias abren sus pétalos
 en la brevedad de un vuelo de aromas,
que impregna el aire.
El aire es un cálido murmullo, un hálito de vida,
respirando en un nuevo día.


El calor muestra la fatiga de las ardorosas 
frentes, goteando linfa en los cuerpos extasiados.
Los ojos temerosos abren sus pistilos sorprendidos, llenándose de luz, mientras 
las hojas del magnolio adquieren un tono
de cuero marrón, tapizando un suelo,
aún no hoyado.


Los caminos de hierba con su sed de rocío,
se alargan hacia el horizonte, como una lengua 
ávida, buscando sus límites, en la exploración 
de su incertidumbre, llenando sus vacíos 
con el eco de nuestros pasos.

Existe un infinito que, sólo fluye en nuestro
anhelo, y nuestra sombra es proyectada,
bajo la luz de un sol que, continúa ardiendo 
en el horizonte.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





sábado, 28 de junio de 2025

Asumir la Libertad.

Quien rompe las reglas pierde un rumbo 
preconcebido, pero a veces, la aventura 
surge de la rebeldía en el inconformismo 
y se manifiesta una nueva percepción.


Un camino, un cruce…y la duda se apaga
con el calor y el impulso de tu resolución.


Arde en deseos, el cambio que se enfunda 
en el hemisferio de un razonamiento,
que cabalga a lomos de la rebeldía, y no existe 
ningún temor al pecado, o una condena posterior, cuando se mantiene la firmeza 
y la seguridad de estar haciendo lo correcto,
aunque tu conciencia, entre en conflicto 
con todo razonamiento.


La libertad está en la decisión de asumir 
toda responsabilidad posterior y desechar
cualquier conato de arrepentimiento. 

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




viernes, 27 de junio de 2025

Quienes comercian con la Muerte.

Arriba, las literas de un sueño de luz inacabado.
Abajo, la miseria que se trata de ocultar,
tras un escudo de falsa opulencia.
Nadie quiere saber, acerca de una verdad 
profundamente dolorosa y tan cierta,
como nuestra negación, con los párpados 
cerrados.


La muerte vaga por las calles vacías 
y el hambre devora a los niños desvalidos,
sin un futuro, con un presente
marcado a fuego, entre las ruinas 
de sus hogares.


Los refugios, hospitales y campamentos,
huelen a humo y a napalm, a incertidumbre 
y a gotas de keroseno.
Hoy ha nacido un día, huérfano de esperanza 
y la soledad es la única compañía,
 para no caer bajo el fuego de los misiles.


La ronca voz de los cañones, silencian
las palabras de paz y los señores de la guerra,
desayunan las almas de quienes
lo han perdido absolutamente todo.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






Vivir sin prisas, para amar con calma.

Los flancos abiertos, seducidos por la vorágine 
de un beso inscrito, como una muesca hecha 
sobre las paredes del alma.
Se debe de vivir sin prisas, para amar 
con la calma necesaria y llegar hasta el fondo,
dejando impreso, un amor sobre la piel
en caricias y sobre el alma, con el sabor 
de esos besos, que nunca se olvidan
porque, ni el paso del tiempo tiene el poder
de desgastarlos.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




martes, 24 de junio de 2025

El amor hace nido en tus sienes.

Un amor, un pecho herido,
un corazón, un anhelo,
para llegar hasta el cielo,
tristemente adormecido.


Sólo un himno, una canción,
se eleva hacia el firmamento,
afinando el instrumento,
que suena en el corazón.


Surge el verso en ese instante,
todo el cielo se derrama,
del amor, surge una llama
eternamente constante.


El amor es el sustento 
que mantiene la esperanza,
la vida sigue su danza,
con el susurro del viento.


Lentamente. disipando,
ese dolor en la herida,
que al amar, en su medida,
hemos ido rescatando.


Cuando el amor es divino,
se posa sobre tus hombros,
ciego de gozo y asombros,
para iniciar su camino.


Nada pide y todo tienes,
se extiende como una sombra,
cuando aparece y se nombra,
hace nido entre tus sienes.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





lunes, 23 de junio de 2025

Cómo azúcar en una taza de té.

La ferocidad humana, se abre con sus fauces 
de metal y metralla, ante los muros que,
fueron construidos con el derribo 
de los puentes que establecieron, una óptima 
comunicación.


Se practica el amor, con una densidad leve
y adecuadamente liviana, para que nadie 
se sienta atrapado, cuando la liberación 
de su alma es inminente, y el temor 
comienza a disolverse, con la ternura 
de un azucarillo dentro de una taza de té.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.



Presta un poco más de atención.

Por esa necesidad de abrir un hueco 
en las conciencias, de apaciguar tormentas,
cuando la voz se desgarra en jirones de sangre
y carne, ante la imposibilidad de ser escuchada, de otro modo más cercano,
menos distante.


Al refugio de la sombra y en  silencio, indago
en el fondo de todas las preguntas, desenvueltas de su papel de tornasol, 
que muestran una acidez inusual y  un sabor,
tan acre, que se asemejan a las realidades 
que negamos, más por decreto,
 que por necesidad.


Las ventanas se abren a los abismos incomprensibles y se proyectan los puentes 
que, unirán la razón y el deseo en una
amalgama de intenciones y propósitos,
que desembocan en una verborrea irreflexiva,
con objeto de que…( Esta vez, al menos)
se vea una atención, predispuesta a escuchar,
algo más que unos segundos de distracción.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Quien vive en la espera, se desespera.

Dicen que, quien espera, desespera;
si larga es esa espera, es una lanza,
que hiere tu paciencia y esperanza,
quedándose en la sombra, su quimera.


La vida es movimiento, y siempre danza,
lo que hoy se ve en lo alto, cae abajo,
no bastará el tesón en tu trabajo,
no siempre se mantiene su alianza.


Se trata de emprender ese camino,
que eliges y que puedes decidir,
cual es mejor manera de vivir 
y hallar la mejor ruta en tu destino.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




La Rúbrica del día sobre el Firmamento.

Arriba, las feroces fuentes, irradiando, 
emanando salpicaduras de luz y agua 
en el deshielo último de la aciaga noche.
Las estrellas son el parpadeo de unos ojos,
durante la nostalgia, en la profundidad 
de unos peces resueltos, en los planetas 
deshabilitados.


Arriba, el misterio devora entre sus fauces
al prematuro día.
Día nonato que, espera un golpe de luz,
para saberse espléndidamente brillante.


El ámbito celeste, recrea un anhelo 
en la proyección de sus ojos, un parpadeo 
incesante sobre el azogue plateado.
Como un agua evadida hacia las cumbres 
perpetuas o esa limitación que aparece,
en el fondo oscuro de todos los tapices
sin rematar, en los hilos desmembrados 
de sus genéticas constancias.


Sólo arriba, se suceden los milagros de luz,
entre las cenizas que, el día deja, después 
de todas sus combustiones solares.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




domingo, 22 de junio de 2025

Sonido condenado a un silencio atronador.

Su atronador silencio derramado 
acude hasta el oído, que enfermizo,
se evade del estruendo del granizo,
quedando así, el sonido silenciado.


Un golpe con efecto en la cabeza,
mutismo en el vacío de ese instante,
que alcanzará un matiz, que es importante,
ahogándose el sonido en su tristeza.


Silencio atronador, en la entropía 
de un frío que se agita presuroso,
ante el calor de un grito, que espantoso,
proclama su ebriedad en la alegría.


Así el sonido calla y se cercena,
al filo de un silencio que soporta,
la muda realidad que le transporta,
hacia una soledad, que le condena.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Sueño volátil de una realidad imaginaria.

Caminamos hacia la luz, con algunas esquirlas 
de sombras apagadas, sobre un fondo 
de triste recelo o temor infundido,
aún no resuelto, pero perenne en el ático 
de todas nuestras visiones tardías.


Dedicamos toda nuestra vida, a procurarnos 
un espacio cómodo y un futuro resuelto,
que nunca llega a cumplir 
nuestras expectativas, y por supuesto…
¡Soñamos siempre en nuestra memoria,
una vívida imagen, de aquello que deseamos,
que ocupe un lugar privilegiado en nuestro 
ámbito!


La inercia de la vida, nos arrastra hacia 
un fondo que, se precipita en un vacío 
sin forma, pero existencial, y su solidez 
varía entre los espejos de todas las ilusiones,
que fuimos lentamente forjando, para poner 
un nombre adecuado a nuestro destino.


Nada parece sorprendernos, y sin embargo,
bebemos la belleza apresuradamente,
sin tener en cuenta, la cabida en ese limitado 
espacio, entre la realidad palpable 
y ese márgen de esperanza que nos queda,
después de cada desengaño.


La obviedad declara la certeza de la duda,
ante los espejos quebrados de todas
las fantasías incumplidas.
Seguimos caminando hacia una luz incierta,
a pesar de que aún no tenemos constancia 
de un próximo amanecer, pues tan sólo 
es un sueño volátil, que anida en nuestro 
pensamiento.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




En el curso de la vida.

En el curso de la vida, uno se siente afluente 
de muchos ríos, o cauce en el que navegan
todas las situaciones imprevistas, 
que se niegan a sumergirse en el olvido.


Por ello, la línea de flotación dependerá 
de la voluntad de arraigarse en la orilla,
o descender hacia los abismos de la razón,
en busca de nuevas experiencias.


En el curso de la vida, caben todos 
los naufragios posibles y un último rescate,
cuando ya nada se espera y la isla 
más próxima, nos aísla en una 
turbia soledad, hasta ver nuevamente,
brillar el sol sobre nuestra nuca, abriendo 
los ojos a una nueva perspectiva,
que nos permita ampliar nuestros horizontes.


Ahora la sensación,  es la percepción 
inequívoca, de una realidad 
anteriormente soñada 
y pocas  veces percibida.
Todo se abre ante el entendimiento, 
y la luz, lejos de herir nuestras retinas, 
refracta la  imagen pura de la ternura, 
proyectando la versión más vital 
y profunda de todos los espejos, 
que fuimos rompiendo  en la opacidad 
de una triste existencia.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




sábado, 21 de junio de 2025

Máximas temperaturas.

Amanece el día, doliente, febril, teñido 
de un rojo carmesí.
Agotado y sin aliento, garganta seca 
que anuncia una árida consecuencia, 
que, a la flor seca en su tallo.


Tan sólo el verde exultante del bosque,
se protege a duras penas, 
de un sol irreverente, que deja su impronta 
de angustiosa sequía, sobre los márgenes 
de los ríos.


La ciudad se asfixia ante la subida 
de un mercurio que, parece estallar en oleadas 
de calor, y el sudor es esa ofrenda de sal,
que pule brillos en las frentes, goteando 
en un incesante suspiro de ardoroso semblante.


Sobre la calzada, el alquitrán se derrite 
y hay un olor pesado y denso, 
que nos impide  respirar el escaso aire, 
en la quietud de una tarde, que cae vencida 
en un crepúsculo incendiado sobre las brumas
del horizonte.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





jueves, 19 de junio de 2025

“Muy frágil “ Manejad con cuidado.

Poesía y filosofía, de la mano,
 en un ávido encuentro entre la simbiosis 
de una realidad inventada y la certeza 
de no saber, cuando estamos soñando 
con una experiencia, o si dicha experiencia,
forma parte de un sueño, del cual 
nos negamos a despertar, temiendo que 
su dureza hiera nuestros sentimientos 
más frágiles.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Apología de la Ignorancia Asumida.

Sobre los dientes de la rueda del tiempo,
aparecen las caries, por no saber masticar 
lentamente las realidades, antes de ser 
digeridas.


Las digestiones lentas son un paso seguro,
hacia una muerte silenciada y declarada 
de escaso interés mundano.
Nadie considera especial o importante,
el óbito de una palabra, 
que se halla marchitado entre las hojas
de un viejo libro, que fuimos incapaces de leer,
ya sea por vergüenza o por temor 
a descubrir un secreto,
que todos intuimos y necesariamente callamos, 
por no declararnos abiertamente,
ante una evidencia más grande que nuestras
expectativas.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





Sin un atisbo de confianza comprobada.

Aproximas tus ojos de vidrio inexacto,
a las esferas de los relojes y el tiempo 
se detiene, mimoso ante el capricho de desleír 
lentamente las horas sobre el cielo de tu boca.


Aproximas las lentes de una fingida realidad,
para observar vagamente que, 
con los ojos cerrados, la realidad adquiere 
una nueva dimensión.


Abres tu mente y guardas entre tus piernas,
los secretos que niegas aceptar y declarar,
por temor a los insectos nocturnos, 
que pululan entre los sueños más fugaces 
y menos estáticos.


En la hoguera que mintió su fuego interno,
se queman las inexactitudes que convergen 
en un espacio prohibido a las mentes vulgares, 
porque nunca sabrán  a donde conducen 
todos mis pensamientos.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Sobre el limo de todas las existencias.

Una ventana abierta y un horizonte erguido 
sobre la extensa llanura.
A lo lejos, el mar se adivina, besando 
imposibles al cielo.


En la redoma que contiene los días pasajeros,
una huella es borrada cada amanecer,
dejando el sendero abierto a otros pies,
enfundados en el cuero de unas sandalias,
con esa libertad que, recoge el polvo 
de los caminos y el agua de los recientes 
charcos primaverales.


Se bebe el agua, con la avidez de una boca
bien abierta, con la matriz hendida de la tierra 
que, en la entraña guarda la fría humedad,
portadora de vida.
Entre el ahora reciente y el mañana venidero,
hay un espacio que cubrir, con los segundos 
que se van perdiendo hora tras hora.


Como migajas del destino,
 sobre un sendero recorrido, quedan
las memorias evanescentes, sobre el limo
de todas las existencias.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




miércoles, 18 de junio de 2025

La tierra clama justicia.

Los puños apretados, y la tierra 
bajo los pies, clamando una justicia,
que el verbo se ha olvidado en su pericia,
perdido entre las sombras de una guerra.


El hambre nos devora la razón,
el odio es esa fuente inagotable,
que alcanza ese destino inaceptable
bajo el fragor del fuego de un cañón.


No bastará esconderse en la oración,
si ves que, tu conciencia adormecida,
ignora que una mano está tendida
y pide una paz sin rendición.


No escondas tu soberbia, adelantando 
que la  tierra tan sólo pertenece,
a quien lucha por ella. Si perece,
su muerte la estarás justificando,
con un triste ideal y fanatismos,
que arrastran los errores del ayer,
te niegas a aceptar, no quieres ver,
cuan grande es la maldad en sus abismos.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Como la luz del día.

Amante por un tiempo impenitente,
sobre un rumor de agua, complacido 
por este corazón enardecido,
amante en un silencio diferente.


En su quietud, el cuerpo se adormece,
por la ebriedad del gozo compartido,
en esa levedad, adormecido,
tendido en una sombra que perece.


Mis besos, acuñados en tus labios,
reciente es el impulso, que me enerva 
en esa vibración que siempre observa:
Los besos silenciosos no son sabios.


Estallan por amor, con el sonido,
que buscan despertar algo distinto,
meciéndose en el brote de un instinto
y dulcemente el beso es compartido.


Amor que reverbera lentamente,
en esa salvedad, libre de enojos,
prendido por el brillo de tus ojos,
reinando en los espacios de mi mente.


Resuelvo mi tensión, en la agonía 
de quien lleva la luz a sus adentros 
y quiere amar de nuevo, en los encuentros,
como quien vuelve a ver la luz del día.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




martes, 17 de junio de 2025

Escribo sobre la Vida.

Acierto a pensar y siento,
que todo lo que a mí acude,
me sorprende y me sacude,
por todo lo que presiento.


Entonces, tomando asiento,
me he dedicado a escribir.
La experiencia de vivir,
es vital y es mi sustento.


Del alma es el alimento,
toda la filosofía,
que descubro cada día,
en un renovado intento.


Encuentro por fin la llave
y en esta buena ocasión,
brota desde la intuición 
los dígitos de la clave.


Y es poner más corazón 
en la mente racional;
la distancia es abismal,
entre el verbo y la razón 


Siempre hay un buen motivo,
para seguir en la brecha,
la idea enciende la mecha,
que sirve como incentivo.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Nacimiento del libre pensamiento.

Bajo la piel, escudos de agua en la monotonía 
del ritmo, la frase que acuña un pensamiento 
y el postigo que cierra la ventana a lo absurdo.


Sin embargo, ante la carencia de prejuicios,
se va emergiendo desde el fondo, en busca 
de la luz primigenia, con la que trenzar 
todas las impresiones que se abran paso 
desde la experiencia, en un último intento,
de alcanzar esa imagen que resuelva
la salida, en el foco de atención, hacia 
los vástagos de la cordura, sin perder 
un solo segundo de imaginación, subyacente 
en el plano más profundo de nuestro ser.


Existe entonces, el descubrimiento 
de lo más íntimo y secreto, mostrando 
entre guarismos, todas las soluciones 
a las intrépidas preguntas, que ascienden 
hasta la cumbre más elevada de nuestra 
comprensión.


Hay un hálito de vaporosa conformidad,
en las reseñas de todo lo aprendido,
disociando lo que pretendemos abarcar,
con lo que, realmente necesitamos, para
disolver toda duda, cautiva en los márgenes 
de la razón.


Nuestro pensamiento se eleva por encima 
de las mezquinas proposiciones y nace
nuestra verdad, libre de toda condición impuesta, 
sin otro propósito, que el control 
de nuestras vidas.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




lunes, 16 de junio de 2025

Quien persevera alcanza…¿Seguro?

Alguien dijo alguna vez,
que quien persevera, alcanza 
y va llenando su panza
con la mayor rapidez.


Es gratuito el consejo,
si no hay nada que perder 
y, tal vez pudiera ver,
que antes de llegar a viejo,
mi metas, si tengo suerte,
para poder conseguir,
si llego a sobrevivir 
a la envidia o a mi muerte.


Porque, si acaso no llego 
a ver mis sueños cumplidos,
quedarán mis resoplidos,
por tanta maldad, y el Ego
de los que, siendo testigos,
dirán que son mis amigos,
cuando nunca fue verdad 
y he podido comprobar,
que es muy fácil afirmar,
cuando hay otra realidad ,
que demuestra lo contrario;
mi criterio es emisario,
de lo que al fin, me sucede.
Nunca triunfa, aquel que puede
demostrar, por su valía,
que ha de llegar ese día,
si es fuerte la adversidad,
que frente a él, se coloca,
pongo entonces punto en boca
y dejo que todo fluya.
Una cosa es lo que intuya 
en mi larga travesía 
y otra, que llegue ese día,
que al levantar de mi cama,
me sorprenda gratamente 
el apoyo de la gente,
porque ha llegado mi fama.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





Descenso de la amistad en la Bolsa de Valores.

Una mirada sin luz, en la opacidad que no
transmite ninguna emoción.
Un junco quebrado, sin voluntad,
promesa incumplida a merced
del viento temerario, que va borrando 
toda intención de reverdecer.


En un cruce de caminos, surge 
un interrogante más y se arquean las cejas,
con un rictus, que espera una respuesta 
inmediata.
La soledad aparece con un extraño brillo,
tal vez malicioso, y se detiene la sonrisa 
un instante, para no ser mal interpretada,
en el vacío que desconecta toda implicación 
en el cambio de moneda, cuando su divisa 
añadida a la amistad, ha perdido un entero
en la bolsa de valores.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



domingo, 15 de junio de 2025

Akasha.

Entre las finas capas del éter, donde parece
que nada existe y sin embargo, todo permanece, 
el ave de los misterios, guarda celosamente 
el secreto de toda existencia,
pasada, presente y futura, bajo un plumaje 
invisible, protegiendo la verdad no revelada.


La verdad se viste de nuestras realidades,
para manifestarse sin pudor, desnuda ante
los múltiples disfraces de la mente.


La ignominia gobierna el mundo, 
pero tu realidad más profunda, se halla 
en lo más íntimo de tu ser, sin Egos,
sin máscaras inflexibles que, oculten 
la divinidad que subyace en el letargo 
de nuestro subconsciente.


He aquí que, sin tiempo, ni edad, 
quedan registradas todas las huellas,
que el alma va dejando sobre todas tus vidas,
tus muertes y resurrecciones, bajo la gracia 
y en armonía perfecta con el Universo.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



sábado, 14 de junio de 2025

Un pálpito de esperanza.

Todo palpita en incesantes olas,
como una voz eterna, que traslada,
un pensamiento en aura desvelada,
bajo el rumor de mudas caracolas.


Surgiendo el pensamiento, estando a solas,
compartes la experiencia, en la actitud,
que se ha de convertir, en la virtud,
que llevas en tu seno y extrapolas,
hacia esa vida opaca y deslucida,
que pierde su valor en la apatía 
y espera el renacer de un nuevo día,
en una nueva tierra prometida. 

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



viernes, 13 de junio de 2025

Pisemos la cuerda ardiendo.

Pisa la cuerda que te ata
a toda cautividad,
puesto que, a decir verdad,
lo que no libera, mata.


El presidio o cautiverio,
es la cruel antesala,
que no deja de ser mala 
y acaba en el cementerio.


Pisa la cuerda en primicia,
antes de que alguien la use,
tomando poder, y abuse
de una fingida justicia.


Y acabe por sentenciar,
la muerte de un inocente;
cuando se sabe o presiente,
que lo van a ejecutar.


Pisa la cuerda, viendo,
como se quema en el fuego.  
la libertad no es un juego,
cuando la soga está ardiendo.


No hay nada que nos sujete,
solo queda disfrutar 
del cielo, y amplio mar
porque vivir, compromete.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Soy rama del árbol viejo.

Poco a poco va llegando,
el fin de todos los días 
y entre penas y alegrías,
los iremos recordando.


Años de bonanza y bienes.
pretendemos recordar 
y no así, ese malestar 
que pesa sobre las sienes.


Todo tiempo inapropiado,
queda apagado y vencido,
aquello que hemos vivido,
queda en sombras del pasado.


Llega ese tiempo remoto,
como un nuevo nacimiento,
clave del discernimiento,
del cual me siento devoto.


Soy rama del árbol viejo,
siempre a mano, mi palabra 
que en mi ética se labra,
en un amable consejo.


Deshaciendo todo entuerto,
llegando a la conclusión,
que nuestra navegación,
ha de llegar a buen puerto.


Alma con las directrices,
que no están en el guion,
han levantado el telón,
tanto actores, como actrices.


Un elenco mejorado,
porque nada satisface,
lo que muere y se deshace,
bajo un triste decorado.

Por rebelde y por proscrita,
vuelve el verso apuntillado,
sobre un texto recobrado,
en toda palabra escrita.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.









miércoles, 11 de junio de 2025

Durante un compás de espera.

Algo así, como una espuma reciente,
 que al mar retorna, pesarosa de dejar la playa.
Como un canto breve que, se ahoga 
en la garganta, o ese suspiro efímero,
 que guarda un aliento de vida y se oculta 
entre los labios.


Algo así, como un propósito, convertido 
en promesa y el reciente descubrimiento 
de la luz, escapando entre rápidos parpadeos,
desde el fondo de tu mirada.


Algo así,como el cristal o esa perla
 que se engendra en una lagrima,
o el cascabel que brota en cada sonrisa.


Algo así, como un reloj parado,
durante un compás de espera.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




lunes, 9 de junio de 2025

Dos marineros en tierra.

Buscaban la luz en el destello de una mirada 
y el blanco inmaculado de una sincera sonrisa.
Caminaban juntos por la orilla del mar 
y las olas besaron sus pies desnudos.


La aves marinas, pusieron negras tildes con
sus alas, reafirmando el azul del cielo, con el
acentuado ritmo de su vuelo.
Gozaban de un tiempo de calma, que fue 
unicamente interrumpido por el rumor 
de las olas.


Era algo así, como un tímido canto de sirenas, 
que se bañaban en la lejanía.
Un remoto lugar entre el cielo y el mar,
de un horizonte infinito, donde perder la mirada,
en el éxtasis contemplativo.


Era la  virtud de  la calma y el amor,
 diluido en la copa rebosante, 
de un océano primitivo y salvaje.
Era un vespertino encuentro entre el mar
y dos marineros en tierra.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



Acaso un…Destino incierto.

¿Qué estrella guía mis pasos 
en este oscuro camino?
¿Cuál ha de ser mi destino 
en estos momentos lasos?


Si nada al fin se detiene 
y todo gira en la rueda,
caminando aquel que pueda
seguir, si no se entretiene.


En los espejos del agua 
la luna, su rostro mira
y el sol, celoso la admira
desde el calor de su fragua.


La luna nació desnuda,
con su pálida semblanza 
y el sol riéndose, danza
mientras contempla su muda.


La luna reina incipiente 
en sus fases, destacando,
tanto así, si va mermando
o asoma en cuarto creciente.

Luna y sol, por un momento,
coinciden sin ser amantes 
y el cielo viste elegantes 
galas en el firmamento.


El destino no está escrito,
se borra al nacer el día,
con cierta melancolía.
Triste poeta maldito,
tus lágrimas, no han servido 
de alivio en tu redención,
habrá mejor ocasión,
por todo lo que has vivido.


El cielo quedó cuajado 
de lágrimas o de estrellas 
y de aliviadas centellas,
que raudas, habrán pasado,
dejando una breve estela,
por el paso de una vida,
cicatrizando la herida,
sobre el cielo, mientras vuela.


La vida pasa veloz
y el tiempo es la consecuencia,
que brota de la experiencia,
en este destino atroz.


Que vaga en la incertidumbre 
de saber, si apenas luce
todo aquello que produce 
su llama, sin haber lumbre.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



El amor no tiene dueño.

A veces, la vida es terca
y manifiesta el dolor,
cuando termina el amor, 
dando una vuelta de tuerca.


No vemos dificultad,
cuando vives la ilusión 
y se pone el corazón,
perdiendo tu libertad.


Pero, todo es pasajero 
y nada al final perdura,
así pues, la vida es dura 
y conste que no exagero.


Nunca se está preparado 
y al llegar la adversidad,
buscaremos la verdad,
en las huellas del pasado.


Aquellos tiempos felices,
vividos en la inconsciencia,
cometiendo la imprudencia 
de perder nuestras raíces.


Olvidando que primero,
no existe mayor verdad, 
que hallar la felicidad;
nuestro tiempo es pasajero.


Y el amor es sólo un sueño 
que alguna vez en la vida,
pierde su forma y medida,
porque jamás tuvo dueño.


Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz
Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



domingo, 8 de junio de 2025

Que la noche nos sea propicia.

Tendida tú, bajo el arco tensado del cielo.
Pura saeta que, proyectada hacia el amor,
se clava en mi corazón, abriendo una herida,
o un propósito de unir cuerpos y almas,
bajo una noche cuajada de estrellas, o acaso 
rocío sideral, descendido sobre nuestros cuerpos, 
bañados en sudor, entre sábanas 
de blanca inocencia.


Recientes, como salidos de ese sueño,
convertido en anhelo, que busca
 la perpetuidad, en el breve espacio 
de los labios.
Labios entreabiertos que suspiran con besos,
perdidos, entre silencios marchitos y sombras
proyectadas sobre el techo de la habitación 
o el espejismo de un amor, que cayó 
en el olvido.


Busco recuperar la huella de tu cuerpo 
sobre mi lecho, pues aún se percibe tu aroma
flotando, denso y embriagador.
Abrazos imposibles sobre mi almohada 
y mi voz te llama, poniendo el corazón 
sobre el perfil de mi boca, para besarte 
una vez más, y a tu regreso, 
evitar que la noche nos robe los sueños más hermosos,
 que tú y yo hemos compartido 

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




sábado, 7 de junio de 2025

Sutiles Fragancias.

Se deben tomar las cosas,
como los mejores bienes.
No me preguntes ¿Con quienes
compartir cosas hermosas?


El aroma de una rosa
tiene carisma y prestancia,
difundiendo su fragancia,
sutil, pero poderosa.


Escucho sonar violines,
sugiriéndome el olor,
que va dejando el primor 
de los humildes jazmines.


Sus delicadas siluetas,
sugieren la compasión
y recuerdan la canción:
“Un ramito de violetas”


La violeta, en su belleza,
se ha prendido en el ojal 
y el resultado es genial:
Diminuta en su grandeza.


Aunque es de poca presencia,
me enamora, porque asume 
el aroma y su perfume 
en su delicada esencia.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Extiendo mi mano al Uni-verso.

Extiendo mi mano al verso,
tratando de imaginar,
como se puede lograr 
comprender nuestro universo.


Al ser impío o converso,
no veo la diferencia,
no conocemos la ciencia
y el criterio es muy diverso.


Tan sólo sé la impresión 
que queda sobre mi alma,
cuando me transmite calma
a mi pobre corazón.


Producto de una emoción,
que no he buscado, ni niego,
porque facilito el riego 
de una nueva proyección.


Agua de vitalidad,
que bombea mi latido,
para encontrar un sentido,
dentro de mi realidad.


No sé, si es ficción o es cierto,
lo que ahora vivo y presiento,
no diseñé su cimiento,
su código, no es abierto,
se puede ver y admirar,
usando un código afín 
de esta realidad sin fin,
que nos llega a limitar.

La razón es precipicio,
cuando ya no puede ver,
pues no llega a comprender,
si hay un final o un principio.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





El velo del paladar y la gula.

El velo del paladar
es como el cielo en la boca
y en la palabra provoca 
su bien o su malestar.


También nuestro gusto impera
en el sabor agradable,
pierde bocado, quien hable,
se atraganta quien no espera.


Comunica este sentido,
con el olfato, y se anuncia 
ese sabor, que pronuncia 
un deleite conseguido.


El velo del paladar,
tiene espacio suficiente,
para sentir que, algún diente 
se dispone a masticar.


Y si el alimento mengua,
dada la masticación,
permite en esta ocasión,
que no te muerdas la lengua.


Sensibilidad innata,
tiene este docto sentido 
y de sobra es conocido,
que la gula, le arrebata.


Tanto así, un pastel de nata,
como un cocido inminente,
lo que gusta, se presiente,
es decisión muy sensata,
al no querer declarar,
el gusto que nos domina,
pues lo que se tiene en estima,
lo queremos ocultar.


Aunque el placer compartido,
sigue siendo buena opción,
se confirma una excepción,
que siempre toma partido.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






jueves, 5 de junio de 2025

Las crónicas de un pequeño pueblo.

El día se ha desbocado,
silenciosamente ufano
y nos toma de la mano,
camino ya, del mercado.


Al llegar el mediodía,
suenan en  el campanario,
esos bronces, que a diario 
convocan a la homilía.


El cura, en negra sotana,
enfunda su austeridad,
camina con seriedad,
por el pueblo, esta semana.


Alto, como los cipreses,
guardianes del cementerio,
con su gesto adusto y serio,
habla con los feligreses.


-Hace tiempo ya, Ramón,
que la iglesia no visita
y hasta Jesús resucita 
para escuchar su oración.


Tengo ese mal que me aqueja
y limita lo que hago,
dice el doctor, que es lumbago 
y al caminar, no me deja 
acercarme hasta la plaza
y para hacer mis recados,
mi hija, con sus cuidados,
es la que ahora me reemplaza.


-Deseo Ramón, que sanes
y nos volvamos a ver,
cuando deje de llover,
si no tienes otros planes.


-Señor cura, he prometido,
que cuando ya esté mejor 
y pueda hacer mi labor,
todo tendrá otro sentido.


Volveré, como iba antaño 
a misa, un día al menos,
aunque llueva o escuche truenos,
tal vez al final del año.


Ya me puede perdonar,
es tan grande mi dolor,
que sabe Nuestro Señor,
que no he podido pecar.


No tuve tiempo, ni gana,
tampoco tuve intención,
si me da la absolución,
tal vez le vea mañana.


Como es costumbre, a diario,
se dirigen hacia el bar,
con un lento caminar,
cura, alcalde y boticario.


Son los tres grandes pilares 
de este pequeño rincón,
que guarda en su corazón,
su historia, ante los altares.


Un pueblo pequeño, humilde,
donde transcurre la vida,
en su tiempo no hay medida,
no lleva acento, ni tilde.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.


© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.








miércoles, 4 de junio de 2025

Cruzando el Rubicón.

Vuela alto y vuela bien.
No me preguntes ¿Con quién?
¿Por la noche, o por el día?
Vuela con esa alegría,
que te haga despegar. 
Porque el mito de volar,
si quieres…¡Lo lograrás!
Si dejas la pena atrás
y te permite soñar.


Todo es fruto de un anhelo,
no hay distancia, que detenga
al viento, por donde venga,
sobre la amplitud del cielo.


No hay sueño, ni realidad,
que no se pueda cumplir,
si se sabe resistir 
tienes posibilidad,
de cruzar el ancho cielo
en un fantástico vuelo,
siendo una temeridad.


Pero es la única opción,
dejando atrás, a las gentes,
construyendo nuevos puentes,
franqueado el Rubicón.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.








El síndrome de Stendhal.

¡Oh, duende de belleza y hermosura!
alteras el sentir de mi latido,
llevando un sortilegio acaecido,
al vértice total de la locura.


Acaso sea por su envergadura,
que no podré absorber tanta belleza,
los huecos que llenaste en mi cabeza,
tenían una sólida estructura.


Por ello, al franquear limitaciones,
supiste manejar, al entregarme
un arte, que logró conmocionarme,
sintiendo desbordar mis emociones.


Las lágrimas fluyeron por mis ojos,
afluentes del caudal de una emoción,
no pude sujetar mi corazón
y en un dulce temblor, caí de hinojos.


Es tanta la dulzura y providencia,
que al observar su obra y maravilla,
sentí que doblegaba mi rodilla,
ante la perfección que hay en Florencia.


¡Es tanta su belleza y tan hermosa!
que no pude guardar en mi memoria,
el verbo que labró su dulce historia,
en una perfección tan minuciosa.


¡Hay tanta perfección en su estructura!
que siento que desborda mis sentidos,
tan sólo escucho el pulso en mis latidos
absorto en mi ebriedad por su cultura.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





martes, 3 de junio de 2025

Una justa recompensa.

Antes que nada, presumo 
de no presumir jamás,
pues pienso que está de más.
Lo interiorizo y resumo,
al dejar como una impronta,
los detalles, que en mi vida,
al tener justa medida,
puede saberse y se afronta.


No necesito ovación,
por la labor que haya hecho,
apelo al justo derecho,
de una mejor ocasión,
en que disfrute el momento 
de sentir reconocido, 
el trabajo que he ofrecido,
del cual vivo y me sustento.


Por ello, la austeridad 
en mi criterio, ha forjado,
ese carácter pausado, 
hasta la posteridad,
en que todo se compensa,
y en la labor, por su empeño,
ves realizado el sueño,
de encontrar tu recompensa.


Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




Tan sólo un hombre… Un poeta.

Un hombre, solo frente al mundo,
tan sólo una voz, se oye acaso,
como una profecía, ante el ocaso,
eleva el pensamiento más profundo.


¿Un hombre? Me dirás que es poca cosa,
pero ha creado un verso, un pensamiento,
que surge desde un sólido cimiento,
labrando la palabra más hermosa.


Un hombre es una voz, palabra inquieta,
que emerge desde el agua, en la marisma,
palabra que renace, por si misma,
entre divagaciones de poeta.


Su vida es una triste alegoría,
que trata de llenar en las conciencias,
virtudes, delicadas transparencias,
sobre una opacidad, que nubla el día.


Un hombre, pensamiento que sincera
toda su voluntad, y día a día,
expresa su sentir con poesía,
llevando sobre si, alas de cera.


Que bajo un sol de angustias, se derrite,
mas, sigue su labor con ansia pura
y piensa que tal vez, con su escritura,
mantiene esa verdad, que siempre emite.


Alguien lo leerá y vendrá conmigo,
a disfrutar del verso y sus bondades,
para vivir sus muchas cualidades 
y tomará en sus manos mi testigo.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





La armonía atrae la felicidad.

Quiero encontrar la verdad,
con esa certeza plena,
que siempre se da por buena,
a sentir su realidad.


Quiero hallar en la espesura 
de toda una confusión,
el latir de un corazón,
que me trasmita ternura.


Quiero que tu vida sea
una meta a conseguir
y la dicha en tu vivir,
pretendo ser, quien la vea.


Acaparar cada instante,
en un recuerdo furtivo,
sin otro afán, ni motivo,
que dar un paso adelante.


Porque nada se detiene,
todo se alcanza, y se estima,
cuando se alcanza la cima,
porque se va, como viene.


Y en virtud de un sentimiento,
nuestra vida favorece,
ese instante, que merece 
la intensidad del momento.

Escrito en Junio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.