El error y el remordimiento van de la mano.

Si soy honesto y no miento,

aunque caiga en un error,

no buscaré confesor,

pues no hay arrepentimiento.

Nunca creí en el pecado,

y sí en la equivocación;

son ritmos, que el corazón 

lleva por muestra y recado.

Y ocurre, que si no quiso 

escuchar sólo a la mente,

lo interpretó diferente,

en el momento preciso.

El corazón, confundido,

nos ha llevado a la duda,

pues si la intención se muda,

razón habremos perdido.

Y por sentirnos culpables,

aunque no exista condena,

nos invade una gran pena 

y oímos ruidos de sables.

Escrito en Agosto 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Espejismos de una misma realidad.

Sinuosa es la corriente que arrastra 

el limo de la vida.

Los cambios originan la inquietud, 

no sólo por el rumbo impredecible,

sino por la afluencia sobre el cauce, 

cuando se precipita en torrente sobre nosotros 

y no somos capaces de controlarlo.

Nada que atesores permanecerá intacto,

ni mucho menos se ha de prolongar 

eternamente en el tiempo.

Hay una distorsión que confunde 

los reflejos de todos los espejos y la realidad 

se nos muestra como un espejismo,

que desaparece y retorna en múltiples facetas 

de una misma visión deformada,

frente a la avidez de nuestros expectantes 

ojos.

Escrito en Agosto 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Los afilados dientes de la calumnia

Los dientes con los cuales serás devorado,
quedan ocultos tras un gesto adusto
y nunca se sabrá qué intención se esconde
detrás de una sonrisa.

Nada es tan autentico como la vivencia propia,
mientras caminamos entre los espejismos
de las vidas de los demás.
Todos creen saber lo que sientes,
pero eres tú quien se halla en tu interior.

Nadie sabe más de lo que atañe
a su propia vida y se creen en el derecho
de intentar dirigir y controlar la nuestra.

El camaleón está al acecho, ayudado
por su mimetismo pictórico,
pero basta un leve sonido o un zumbido,
para que atrape a la mosca con su lengua.

No permitas que nadie use su lengua
contra ti, es muy sencillo hablar calumnias
hasta atormentar tus oídos y las disculpas
siempre son vanas y llegan demasiado tarde.

Escrito en Julio 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Publicado en  el libro de poemas “ A VIVA VOZ”

ISBN : 978 – 84 – 1331 – 821 – 9

Depósito Legal : AL 1827 – 2019

Estrellas junto a un mar nocturno

En las mareas nocturnas
de la investidura del sueño, antes de llegar
a perturbarse en pesadilla,
una mujer traza una línea de fuego
sobre los vestidos celestes
y enhebra las estrellas con el capricho
de un niño huérfano, que deambula
entre la oscuridad de su sino
y la luciérnaga apurada, que habita
en sus ojos.

Acaso no quede lugar para la tristeza,
que rueda calle abajo, cuando el empedrado
es el único camino por dónde descienden
todos los ánimos que quisimos enarbolar,
como bandera o símbolo
de nuestras vidas desgastadas
 de tanta palabra y su inercia,
incomprendida y náufraga
en un mar de emociones,
donde el mástil de nuestra determinación
se quebró entre los vientos fugitivos.

Escrito en Agosto 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Publicado en  el libro de poemas “ A VIVA VOZ”

ISBN : 978 – 84 – 1331 – 821 – 9

Depósito Legal : AL 1827 – 2019

Todos somos eco de todos

Las ramas de los árboles, desnudas de ramas,

se me antojan yemas de dedos, 

buscando respuesta entre las nubes 

de algodón de un cielo gris.

Hienden sin herir, el espacio, como un amor

que no se carga de tildes, ni pronuncia 

la aspereza de las palabras,

que no son sentidas.

El eco es una reverberación del pensamiento,

en un silencio que guarda el secreto de amor,

que sin nacer, se siente aún no resuelto,

pero con una imperiosa voz 

que emerge del alma, rompiendo  la soledad y 

el mudo soliloquio de un razonamiento,

que nace en el encuentro de uno mismo 

en otro ser humano.

Escrito en Enero 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

El amargo sabor de la ausencia

En una larga avenida, encuentro
algunos callejones vacíos de gente,
llenos de papeles, que el viento agita
y arremolina en el polvo de alguna
de sus oscuras esquinas.

El mundo a veces, se vacía ante nosotros
y aunque busquemos tan sólo la soledad,
encontramos esas ausencias
que jamás quisimos y sin embargo,
nos esperan en cualquier recodo
para parasitarnos de melancolía.

Una lágrima resbala,
como gema imperceptible  y nadie sabe
lo que pasa por tu mente, en ese momento
de íntimo recogimiento y contemplación
de ti mismo.


No es auto compasión, sino saborear
el amargo sustrato del vacío,
que la soledad deja en las cavidades
de las ausencias.

Escrito en Agosto 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Publicado en  el libro de poemas “ A VIVA VOZ”

ISBN : 978 – 84 – 1331 – 821 – 9

Depósito Legal : AL 1827 – 2019