Lágrimas vanas en el vacío

Guardo mis silencios en los bolsillos vacíos
y proclamo la voz en el grito desgarrado
que pronuncia apóstrofes de la vida.

Mis manos están hambrientas de tu cuerpo
y en mi ceguera intento palpar
las ausencias que has dejado flotando
en mi entorno.

Golpeo los huecos que dejé con mi falta
de atrevimiento en la constancia y acaso
celebro la angustia con el despecho
de una fingida despreocupación.

El aire es soluble en los suspiros
y se extiende una blanda mirada
sobre el frío asfalto.

La lluvia es una incesante incontinencia
de lágrimas, que el cielo precipita,
solidario al sufrimiento del hombre
que no ha sepultado sus penas,
ni ha liberado todos sus temores
de la prisión de su inconsciencia.

Escrito en Agosto 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Vivir la plenitud del amor

Va cambiando la estructura
de mi pensamiento, porque aún
hay esperanza en el amor.
Algunos besos se agriaron en mis labios
por el peso de las mentiras y aprendí
que el amor no se paga con sufrimiento.

Así que he decidido no hipotecar mi vida
por alguien que no lo merece.
Quiero beber el agua fresca de unos labios
que se sacien en la verdad, antes de sellar
un beso en otros labios, rompiendo
con su dulce sonido, el silencio.

Quiero sentir esa verdad  que un cuerpo
entrega al contacto con otro cuerpo,
diluyéndose sus almas, en la unión,
formando una sola alma en el amor.

Quiero vivir la eternidad en un momento
y hacer que ese momento sea el inicio
de una vida feliz a tu lado,
con el único propósito de hallar todas
las facetas posibles que nos conduzcan
a un estado de felicidad permanente.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

La luz que hay en tu sonrisa

Sólo la luz de tu sonrisa ilumina mi vida.
En un abrazo, el calor de tu pecho
me conforta en los días grises.

Ya no hay nubes oscuras sobre mi tejado
y mis ojos siguen el ritmo de tus caderas
y danzan con el vuelo de tu falda
o tus cabellos, agitados por la brisa.

Te amo y ni siquiera me pregunto porqué,
tal vez suceda que cada vez que,
entornando tus ojos...tu mirada me ofrece
un cielo que jamás contemplé y de tu boca
fluyen los besos más dulces que jamás probé.

Te amo porque estás en la cúspide
de mis pensamientos, porque te siento,
porque te sueño y cada día es domingo
y vuelan muy alto, todas las golondrinas
de mi imaginación.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

A quien persiga la suerte

La suerte sólo se alcanza
si en tu vida la persigues,
pues todo lo que consigues
tendrá un brillo de esperanza.

La suerte se llama Sino,
pues su nombre es apropiado,
si por el camino andado
vas trazando tu destino.

Suerte es saber disfrutar
de la vida y de sus dones,
sólo si tú te propones
luchar y perseverar.

Suerte es el saberte pleno,
vivir con conocimiento
de que todo, en un momento,
no va a resultar tan bueno.

Que la suerte es una estrella,
que puede variar su rumbo
y que somos vagabundos
que perseguimos su huella .

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Desde el humilde barro

Si Dios creó desde el limo
su más grande creación,
tan sólo presta atención...
¿Porqué puso tanto mimo ?

A la materia grosera
obsequió un soplo de vida,
después de crearla, cuida
su alma y la considera...

Digna de inmortalidad
y así, a su fiel semejanza,
lo sopesa  en su balanza
y crea su realidad.

Prueba si su material
mantiene en si su firmeza,
si usa bien su cabeza
para evitar todo mal.

Pero al darle libertad,
sin antes haberla asumido,
traiciona su cometido
y este ser trae la maldad.

El ser humano es traidor
y sabiendo que es eterno,
pierde el temor al infierno,
negando a su creador.

Dios le concede el perdón,
pero no olvida ese daño
y bajándole un peldaño
le quita al humano el don.

Como ya no es inmortal
y a Dios le hubo negado,
para borrar su pecado,
volverá a su barrizal.

Y al comenzar desde abajo,
para alzarse en lo divino,
arduo será su camino
en el esfuerzo y trabajo.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Volverá la Primavera...

Cuando observo la montaña
con sus nieblas extendidas,
siento un clamor de vida
y una visión que se empaña.

Y más allá de los montes,
se extiende sin medida el mar
¡Ay si pudiera abrazar
el cielo en el horizonte!.

Y una vez, así logrado
y colmados mis anhelos
ascender muy alto al cielo
por un gran sol coronado.

Buscar para ti la luna,
mientras duerme en su reflejo,
entre diáfanos espejos,
de verde en tono aceituna.

Y mostrarte en un poema,
todo el amor que yo siento ,
en un atrevido intento
de llevarte por emblema.

Amarte con el cuidado
de quien guarda en su interior
todo el desbordado amor,
que jamás te he declarado.

Porque al sentir el flechazo,
tanto amor, me ha desbordado,
que lo callé enamorado,
temeroso del fracaso.

Te amo y es tan de veras,
que escucharás mi latido,
cuando lo hayas advertido,
volverá la primavera.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Los signos de santidad

La sal de la tierra, la acidez del pan
sin levadura y el óleo para ungirnos
en un gesto puro, conforman la abducción
en el sagrado oficio.

Santificamos el día con una acción de gracias,
por los dones recibidos y bendecimos
todas las puertas de nuestro hogar,
logrando una conexión perfecta,
en comunión con Dios.

Cuando bendecimos el alimento
y a quienes amamos, calificamos de sagrado
este acto que llena nuestras vidas.
Se alcanza la santidad con cada acto
y efecto, al dejar con nuestras obras
un rastro de bondad a lo largo
de nuestra existencia.

Se muestra en la constancia, nuestra intención
y recogidos  en la meditación
e interpretación de cada signo,
decidimos tomar un camino de luz
y de verdad, en cada sendero recorrido.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"

Sobre las alas del Amor

Me guían tus pasos firmes,
tu voz calmada y serena,
merece entonces la pena,
amarte antes de irme.

Me gusta la arquitectura
de tu cuerpo y de tu alma,
pues se presiente en  la calma
su más sólida estructura.

Soy fiel a lo que yo siento
y no puedo equivocarme,
ni pienso, que limitarme
sea mi apoyo y mi asiento.

Te presiento toda amor
y una gran mujer, que vela
desde su justa cautela
su canto de ruiseñor.

Porque el amor no es un juego
y hay que seguir su verdad,
siendo fiel a su bondad
y no arrepentirse, luego.

Ese suspiro que exhalas,
cuando estás enamorado,
te eleva hasta los tejados,
volando sobre sus alas.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Yo soy río y tú eres mar

Yo soy río y tú eres mar,
te he buscado en mi andadura
y en tu desembocadura
siento que te puedo amar.

Anduve un tiempo perdido
y al comenzar a fluir
di un sentido a mi vivir,
rescatado de mi olvido.

Hallé tu amor y creía
que jamás iba a encontrar
un motivo para amar
y me acerqué a tu bahía.

Así, mi gran desenfreno,
contigo se fue pausando,
en tu mar me fuí anegando
y de tu amor estoy lleno.

He dejado de ser río,
para ser por ti ese mar
y he descubierto al amar
tu océano ¡Amor mío!.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Ganarse el Cielo

El cielo es metafísico y perfecto,
oblicuo a cualquier imperfección,
cargado de tensión y de temor
ante la realidad de un genio abyecto.

El cielo en el creyente es su meta,
ante una fe de horror en el infierno,
temeroso del dolor, por ser eterno,
evitando que un error le comprometa.

El cielo es ese sueño, que no puedo
hallar en esta vida material,
tan sólo un pensamiento en este erial,
producto de mi afán y de mi miedo.

El cielo es necesario y es preciso
para inculcar en todos la esperanza
y alzarnos con la voz, en alabanza,
con fin de conseguir el Paraíso.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz
Expósito.”zuhaitz “.

El milagro de vida cotidiano

En la dirección en la que el sol
se apodera de la noche, se mecen los vientos
que esparcen las gotas de rocío,
la tierra sedienta se abre
y en un amoroso gesto, absorbe el agua
que luego entrega a las plantas
que se elevan desde sus tallos al cielo.

Respira la vida un verde esperanza,
hisopo que agita el milagro cotidiano,
donde se mueve la savia, como sangre nueva,
que exultante, brota y se derrama
bajo un signo de continuidad,
 nacido del instinto de perpetuarse.

Todo fluye por un mismo cauce
que se desarrolla sobre sí mismo
y cada amanecer se adueña
del día por suceder, en una empatía
que se reduce y a la vez se extiende
hacia sí misma y hacia un infinito,
que sobrecoge y desafía toda explicación.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Bajo el velo de un misterio

Cuando un misterio se desvela,
pierde la magia de su hechizo.
Te presiento bajo la interrogación
de un enigma, que borra las huellas
del camino y un eco de viento sutil,
que pronuncia las imágenes más reales,
sin dar forma precisa
a cada pregunta gestada.

Aérea, bajo el dintel de una puerta cerrada,
cuya llave se arrojó al mar, para no recobrar
el instinto que mueve los hilos
de un pecado, acaso inventado,
rompiendo cada uno de los moldes
 de la monotonía y creando un mundo nuevo,
sin postigos, con las ventanas
abiertas a la eternidad,
tan sumamente adivinada, como insondable.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Empápame en tu lluvia

Empapa mi corazón con tu lluvia,
reciente de besos, con una humedad
de boca jugosa o pubis en flor.

Paradisíacamente  te derramas  en dones
de fresca contemplación, durante el ascenso
de la libido, desde tu volcán dormido
de pasiones, hasta las laderas
de tu falda en vuelo, hipnótica y circular,
que rodea todos los secretos especímenes,
que componen cada célula, que tu figura
muestra desde el último día, donde sentiste
la creación en ciernes, brotando
desde la intimidad de tu sexo florido,
 hasta el brocal de tus labios,
que pronuncian la incoherencia
del sentido último, al desgranar
cada instante de vida, entre mis labios
y tus muslos ávidos de caricias.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Mantened viva su llama

Jamás se apaga la llama
de quien vive en el amor,
pues mantiene su fulgor
si siente amor, cuando ama.

Fiel a su ritmo y latido,
vive preso en la emoción
que rige su corazón,
cuando es correspondido.

Quien el amor comunica,
aún en toda adversidad,
encontrará su verdad
y así su amor no claudica.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Nunca fuí don Juan Tenorio

Jamás levanté pasiones,
ni he sido un don Juan, al uso,
es un " papel " que rehuso
por muy sobradas razones.

Creo que la seducción
es ocultar con engaño
la verdad, haciendo daño,
escondiendo una intención.

Dejando el honor maltrecho,
al satisfacer, por ruines
todos los amargos fines,
sin razón y sin derecho.

Enamorar no es amar,
si sólo se contempla el Ego,
miro a otro lado y niego
que pueda perjudicar...

Los sentimientos ajenos,
fingiendo una falsa hombría,
en una pena, que umbría
rompe un ánimo sereno.

Y bajando la testuz,
mando, ordeno y obligo,
contemplándome el ombligo,
dejando un negro capuz...

Que ocultando la virtud
con apetitos carnales,
disfrazo de carnavales
mi más oscura actitud.

El amor no es algo vano
de un don Juan, agrio y burlesco,
prefiero amar, si parezco
más que un don Juan, un Cyrano.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Los versos se han de vivir

No es sólo lo que yo elijo
lo que compone mi vida,
es esa justa medida
de todo cuanto me exijo.

No es el agua de un botijo
lo que ha de calmar mi sed,
más bien, observad y ved
mi antagónico prefijo.

Que no es elegir un tema
para olvidar con desprecio,
que todo tiene su precio,
si lo ignoro en un poema.

Que no sólo es escribir,
lo que ha de mover mi pluma,
pues los sueños son espuma
y el verso se ha de vivir.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Mi vida la rige una estrella

Mi vida la rige una estrella
que yo llevo en mi interior,
me sorprende su fulgor
y hace mi existencia bella.

También clava sus aristas
puntiagudas y tenaces
siempre que el dolor renace
sin que apenas lo resista.

La estrella guía mis pasos
y en mis escasos aciertos
satisfechos y cubiertos
quedan mis grandes fracasos.

Su luz, a veces me inunda,
es grata y reveladora
y otras veces, cegadora,
siento su fuerza iracunda.

Debo mirar su destello
con la brevedad del rayo
y no cometer el fallo
de ceder a su atropello.

Si no, por su luz cegado,
mi vista se debilita,
cuando más se necesita
de su brillo esmerilado.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Tu mejor retrato

Quiero dibujar con luz tu rostro,
pero no encuentro los colores que igualen
el rubor de tus mejillas
o el destello de tus ojos, cuando sonríes feliz.

No existen tales colores en mi paleta
de enamorado pintor y bebo tu imagen
despacio para plasmarte sobre un lienzo,
pero cuando lo observo, no veo ni la forma,
ni los matices que de ti siento
en mi mente y mi corazón.

Trato de captar cada destello de luz
que emite tu sonrisa, con mi cámara de fotos,
pero se muestra mejor tu imagen en mi mente,
cuando te evoco en mis recuerdos.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”

Los Pilares de nuestra Fe

Necesitamos creer,
cuando falla la razón
y sentimos perecer
en temas del corazón.

Cuando a pesar de que gira,
el mundo es la gran mentira,
que tratando de olvidar
no se quiere detener.
Cuando ya no puede ser,
que se pueda soportar
tanta y tanta aberración...
buscamos la orientación
de nuestro rumbo perdido,
por todo lo convivido.

En  nuestro empeño y esfuerzo,
buscamos ese refuerzo,
ese pilar que sustente
esa idea, que aún latente
quisimos ir construyendo,
pero se va diluyendo.

Toda su naturaleza
se destruye pieza a pieza.
Ahora su precio es muy bajo
y el esfuerzo y el trabajo
varía desde su estética
el brillo de nuestra ética.

Y si ya, nada se intenta
poco rentable es su venta
y por cómoda vagancia,
será escasa su ganancia,
perdiendo la integridad
de ser como  siempre fuimos...
si olvidamos que vivimos
fieles a nuestra verdad.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Nada dura eternamente

Ayer soñé que perdía
el sueño, por no tenerte
y fue peor que la muerte,
pues todo mi cuerpo ardía.

Me consumía en el llanto
y la desesperación,
se paró mi corazón
ante el horror y el espanto.

Cuando desperté  encontré
una nota que decía
que tú ya no me querías
y de nuevo sollocé.

Pero no me consumí,
aunque preso en mi tristeza
casi pierdo la cabeza,
o al menos, eso creí.

Y comprobé, que en la vida,
igual que pasa en los sueños,
no basta sólo el empeño,
no todo tiene cabida.

A veces en la ilusión,
vivimos en una esfera
y puede resultar muy fiera
nuestra vuelta a la razón.

Nada dura, ni es eterno
y se ha de asumir su suerte,
para no hallar una muerte
más dura que el propio infierno.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Cuando uno camina...

Cuando uno camina, no sabe dónde acabará,
sólo vemos lo que vamos dejando a atrás,
lo que fue ayer y hoy no es.

Reminiscencias de una luz que agoniza
en nuestra memoria y acaso quede
ese matiz difuso que albergamos
en nuestro interior y deseamos recordar
como experiencia.

Cuando uno camina, toma una decisión
tras otra, un paso tras otro y la mente
abierta de par en par, con la barbilla levantada
y los ojos fijos en el horizonte
al que deseamos llegar.

Nunca se llega al lugar que ocupa
nuestra mente, sino a otra dimensión distinta,
con nuevas vivencias y otro sol brillando
sobre nuestras cabezas.

Soñamos despiertos,
con algo que nos sorprenda
y logre desprendernos
de esa melancólica monotonía
que tiñe de gris cada uno de nuestros días.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

El alimento de mis esperanzas

La voz del silencio se hace eco
de las calladas voces de mis pensamientos
y ocupa el espacio con tu imagen.

Hay una recreación de la belleza,
que de tu corazón siento en mi
y adoro esa divagación
en la quietud de la tarde,
cuando preso de la añoranza, te recuerdo.

Nunca quise construir con humo
la solidez del amor, pero soñar supone
un mínimo esfuerzo, para quien anhela
esa calidez de manos
que estrechan mis manos y paseamos
por todas las orillas de todos los mares,
que colman las emociones.

Agua al fin o lágrima vertida.
Acaso sea la sal de tu cuerpo, la que provoca
mi sed de ti, pero te amo desde la distancia
en estos espacios de ausencia,
desde donde te invoco,
para sentirte de nuevo reciente,
como un nuevo amanecer en mis días
o el pan con que alimento
 todas mis esperanzas de volverte a ver.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz ".

Buscando la proximidad hacia ti

Quise guardar la luz de tus ojos
y mantener la llama que ardía en ellos,
antes de que sucediera un eclipse
y así evitar no vernos o no sentirnos abrazados.

Abrazados, para sujetar entre nosotros,
esos suspiros, que como vapor de agua
brotaban de nuestras bocas
exhaustas de jadeos, cuando ya
nuestros labios
rotos de besos, se han colmado de la miel,
que el amor obsequia a quienes
buscan beber del manantial incesante,
que desemboca en caricias de brazos
que se extienden hacia ti,
o  esas plumas  de suave tacto que son
mis dedos furtivos.

Hierba, al fin  donde se mecen
nuestros cuellos.
Almohada de sueños esclarecidos,
vítreas miradas, que congelan un instante,
en esa atracción irresistible que une
los  soñadores ojos y enhebran la ilusión
de mantenernos unidos, cuerpo a cuerpo,
sin distancias imposibles
y todas las proximidades que concurren
bajo el signo de un amor correspondido.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

Desde tu alma de poeta

El amor no es de mención,
no es algo que esté reglado,
tan sólo al saberse amado
nos palpita el corazón.

Es una voz que nos llama,
un sentimiento que acoge
nuestro ánimo y escoge
la figura de una dama.

Ella sube a los altares
de nuestro cielo soñado,
por cuanto lo has deseado
entre emociones dispares.

Ella forma tu universo
y el centro de tu atención,
por ella la sinrazón
y la razón en un verso.

Sacude tu mente inquieta
y sientes poder volar,
cuando comienzas a amar
desde tu alma de poeta.

Escrito en Julio 2029 por  Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"

Un esqueje de Poesía

Soy mi propia libertad
y el camino que transito,
soy el escollo que evito,
mi malicia y mi bondad.

Soy la piedra en el camino,
polvo que el viento remueve,
soy un reloj a las nueve
y al final, soy mi destino.

Soy mi amargor en la pena
y el dulce de una sonrisa,
también soy la calma y prisa,
mi sensatez y condena.

Soy mi alumno y mi maestro
y hablan de mi, mis acciones
agitando las razones
por las que lucho y os muestro.

Un aprendiz, que equivoca
en un complicado oficio,
sin sueldo, ni beneficio,
lo que ha de nombrar su boca.

Soy un poeta, que inquieto,
vive con la poesía
su razón de cada día
a un tiempo, al cual me someto.

La poesía es vital
para unir las voluntades,
si en la metáfora añades
un contenido social.

Soy poeta, aunque me queje
de todas las injusticias,
cuando un poema se inicia
brota en mi alma su esqueje.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Morir para evitar mi propio suicidio.

Llegué a tener varias tentativas de suicidio,
asqueado de mentiras, de desamores
y traiciones.
Decidí buscar respuestas
 más allá de la muerte, pero algo me unía
irremediablemente al  vacío de esta vida.

La "gente normal" me aconsejó
ir a un psicólogo o a un psiquiatra.
El psicólogo me hizo rellenar un test
tan ilógico, que pronto descubrí,
que su salud mental estaba peor que la mía .
El psiquiatra en cambio, me inyectó
grandes dosis de hipocresía,
tomar tres veces al día, unas cápsulas
para mentir y elucubrar en mi mente
falsedades, bulos y chismorreos.

Después de largas sesiones me convenció
de que el amor sólo se mueve con el motor
de la avaricia y los intereses de poder
y económicos. Todo lo demás son producto
de mis fantasías febriles, a pesar de tener
la certeza de observarlo en mi entorno,
para después sufrirlo en mis propias carnes.

Ahora soy " normal ", carezco de sentimientos,
ya no creo absolutamente en nada,
no soy feliz y " vivo" una vida...
que es peor que cualquier muerte imaginada.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".

La Buena Muerte

Emoción suicida,
agua retenida.
Sintiendo la muerte
como un musgo inerte.

Todo afán perdido
y el corazón herido.
El alma partida
de pasión desmedida.

Sombra amenazante
y la noche por delante.
Morador de tristezas
para perder la cabeza.

Mis huesos suenan a ruptura
en mi blanca sepultura.
Nada se explica, ni encaja.
Mis huesos en una caja.

Mi voz en un desierto
emite un sonido muerto.
Todas las virtudes
que en vida olvidaste,
se fueron al traste
en sus ataúdes.

La muerte es benigna
y la paz se alcanza,
cesando la danza
en su calma digna.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Hambriento de tu luz

A ciegas te busco, como polilla hambrienta
de luz, ante una farola.

Tiento el bulto níveo y trato de acercar
mis labios al caudal de voces y tonalidades,
que me susurran sobre el amor,
con un atemperado timbre,
 o busco la proximidad de ese beso de miel,
que brota de tus labios, como néctar
con el que elaborar una fresca entrega
de pétalos recientes, que auguran
un feliz día, tras esa alborada que guardas
en tus prístinos ojos constelados.

Me seducen tu voz y tu mirada
y bebo cada segundo a tu lado,
como si se tratara de unas gotas de agua,
sobre todas las irisaciones posibles
de un nenúfar, flotando sobre una emoción
de reflejos de luz, en el instante
en que la tarde es ese recuerdo tardío
de un sueño que tuve y no pude
retener entre mis manos.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

Sentimiento de Culpabilidad

El lastre de la culpabilidad es un peso añadido
a la frágil conciencia.
Es el hierro que se oxida en el tuétano,
cuando la humedad de las lágrimas,
calan hasta el interior y la pena no se diluye,
corroe la voluntad de sentir la libertad
de equivocarse.

La culpa es una imposición, que las religiones
aderezan, para manejar nuestras conciencias,
privándonos del libre albedrío.

Nos quieren clavados en la misma cruz
que construyeron para Cristo,
sin liberación posible, con la sombra
de un delito por la muerte de un inocente...
¡De tantos inocentes!
Arrastrando esas cadenas durante siglos.

Debemos de liberarnos del sentimiento
de culpabilidad, cuando son los asesinos
los que esconden su responsabilidad,
bajo negras sotanas de muerte
y capelos de rojo cárdeno,
como toda la sangre derramada.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"

El suave tacto de la greda

Cuando nada tienes, nada queda.
Un blanco trazo de greda,
que antes se llamara tiza
y a la negra pizarra estigmatiza,
tatuando palabras en su piel,
por no herir con su escrito en el papel.

En esa misión suicida
no deja una profunda herida,
queda un trazo inmaculado
que ha de ser, por su legado
fiel a un claro pensamiento
y perpetúa el momento
tras de su larga andadura,
con luminosa blancura.

Nada que se niegue o pueda
causar alguna molestia,
pues aún viviendo en su modestia,
su tacto es suave, y la greda
escribe tus pensamientos,
se mece en tus sentimientos.

Busca en un rincón perdido
otro buen imperativo,
pues nadie nace sabiendo
y lo que vas a aprendiendo
te servirá al caminar,
tan sólo basta observar.

Porque es duro el aceptar
que alguien pueda dedicar
su tiempo para mostrar,
lo que surge de la espera
de entre caminos de greda.    

Escritos en Julio 2019 por Eduardo Luis  Díaz Expósito.

La contradicción

Todo al fin se contradice
por buscar otro camino,
pues no está claro el destino,
ni el signo que se predice.

Y es que la contradicción
es otra vuelta de tuerca,
a medida que se acerca
nuestra mente al corazón.

Influye nuestra emoción
y nuestras claras premisas,
pero al meditar, sin prisa
se encuentra la solución.

Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz
Expósito."zuhaitz".