contando los adoquines delos bordillos
de las aceras.
Nuestras vidas son como anillos
en distintos dedos, pero todos
pertenecemos a una misma mano.
Pentagrama en la que se ha escrito,
una misma herencia y todo se halla
en un cuenco, cuando la mano
se convierte en puño y se tira
de la soga de la vida y se golpea
la injusticia con firmeza.
Unidos a una misma cuerda, cabe recordar que todo esfuerzo es vano,
si todos los dedos no se unen,
en una mis mano.
Escrito en Abril 2017 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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