para soñar.
Somos la vasija en la que se contiene
todo aquello que buscamos
fuera de nosotros mismos.
Alzo las manos y los ríos fluyen en mi,
desbordando mis ojos.
Todo lo que nace y vibra, está en mi corazón.
El destello del sol, en una sonrisa
y el aire puro, en la inocencia,
que atrae a las aves y las mariposas.
Escrito en Abril 2017 por Eduardo Luis Diaz Expósito."zuhaitz".
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