desleído en la boca del impío
y fluyendo, al igual que fluye un río
desemboca en un abismo impenitente.
Consecuencia de vivir tan locamente,
conduciendo la razón al desvarío,
este tema, ni discuto, ni porfío,
porque busco el equilibrio intensamente.
Es muy frágil esta huella que ha quedado,
necesita afianzarse con premura,
para hallar que la verdad es desvelada.
pues el mundo ha quedado desahuciado,
por su afán, en una triste desventura
y su alma se ha secado, desangrada.
Escrito en Noviembre 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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