para encontrar la verdad,
no es más que una necedad,
porque en necio te convierte.
La vida nos da el consuelo
a pesar del sufrimiento,
esperando así el momento
de alcanzar por fin el Cielo.
Esa imagen deseada
sólo es real en los sueños,
formando en un vano empeño
sólo un brillo en la mirada.
Quien mata a su destino
¿Hace bien o hace mal?.
¿Acaso se hará inmortal
o es tan sólo un desatino?.
¿Quién sabrá de su camino
si no aventura su paso
al éxito o al fracaso?.
Caminante o peregrino.
Por más que eleves tu voz
y la conviertas en grito,
al fin nada queda escrito,
sólo el tiempo y es atroz.
Estés arriba o abajo,
en nada está, ni entretiene,
ni por piedad se detiene,
pues ese es su trabajo.
Escrito en Marzo por Eduardo luis Diaz Expósito."zuhaitz"
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