fluyendo en su manantial
y alguna gota perdida
llevará un brillo especial.
Son las gotas de rocío,
bajo un sol primaveral.
Son nostalgias ¡Amor mío!
transparentes, cual cristal.
Son las lágrimas de amor,
que, en la tierra derramadas,
producen ese verdor
en la esperanza soñada.
El poema resumido
en la emoción, que te embarga
y por amor, lo has sentido
porque es dulce y no te amarga.
Agua que fluye y destila
sentimientos deseados,
que brotan de la pupila
en rostros enamorados.
Agua pura, que del alma
son su frescor y consuelo,
cuando se medita en calma
y es el fruto de un anhelo.
Agua, que de la emoción
es un caudal incesante,
y no existe más razón
en el corazón amante.
Escrito en Enero 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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