lamento todo el tiempo en el engaño,
quisiste sin lograrlo, hacerme daño,
no escucharás de mi, ni un solo ruego.
Ignoras la traición y no has logrado
huir de tu fingido compromiso,
para ello, no requieres mi permiso,
aunque mi corazón lo hayas robado.
Por fin, mi corazón recuperado,
hará de tu desdicha, caso omiso,
pues no seré por ti, necio y sumiso,
si crees que he de volver arrodillado.
No esperes que regrese o que te llame,
pues sólo sentiré tristeza y pena,
sabiendo que va a ser una condena,
amar a quien no sienta que te ame.
La vida te coloca en tu lugar,
si a quien te amó, tan sólo le engañaste,
es claro el destino que firmaste,
no pidas que nadie te vuelva a amar.
Escrito en Febrero 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario