lunes, 20 de septiembre de 2021

La música que brota en un poema.

Como brota la rama, que del árbol nace,
como cae la nieve desde la ladera,
así brota el verso en oración postrera
y en la boca dulce, presta se deshace.


Alimenta el alma ese sentimiento,
que es libre y se expresa en toda extensión 
y unifica mente, alma y corazón,
convertido en ruego, plegaria o lamento.


Verso que contempla toda la belleza,
música de esferas, suspiros alados 
que alcanzan la cima de anhelos soñados,
cubiertos de gloria sobre tu cabeza.


Laurel que a tu frente la ciñe y ensalza,
corona que logra, por tu inteligencia,
el grado más alto de su efervescencia 
y así por tu genio, su gloria te alcanza.


Y danzan palabras con la sutileza
de armónicas notas, música arraigada
que forman estrofas de ágil tonada,
surgiendo un poema en singular belleza.


Escrito en Septiembre 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.


© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






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