lunes, 27 de julio de 2020

Con la ligereza del agua, fluyes y te vas.

Eres agua, cortina de agua naciente
en un crepúsculo adormecido 
de manantiales de savia.


Dulce boca que prolonga el bostezo, 
después de besar todas las memorias,
bajo una intimidad que rompe los secretos 
de un silencio sincopado.


Génesis de amor, que fluye y escapa
entre los dedos.
Agua reciente que se evade, sin apenas
despedir su paso, al lamer la roca inerte
para despertar su ligereza de arena.

Escrito en Julio 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.


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