martes, 8 de febrero de 2022

Luchar y padecer por amor.

Las heridas de la carne cicatrizan,
si te hieren más profundo, y la tristeza 
nos ocupa el corazón y la cabeza…
sus heridas, en el alma se eternizan.


Siempre  queda entre el rescoldo, la ceniza,
de un amor, que por el fuego reducido,
en su ardor y en su pasión fue consumido;
sólo el llanto lo disuelve y lo suaviza .


Siempre escucho, que es piadoso el que perdona 
¿Cómo puedo perdonar, si está sangrando 
esta herida descubierta, porque  amando,
sólo  me causó dolor y me abandona ?.


Si he luchado con tesón, donde lo halla
y jamás me imaginé su ligereza,
me colmaba de ilusión, y mi cabeza 
fue cayendo en el fragor de la batalla.


Pues quien ama y lucha siempre por amor,
nunca piensa en su  derrota, y es su gloria,
conservar ese amor en su memoria,
aunque esto le ocasione un gran  dolor.


Escrito en Febrero 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.


© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




No hay comentarios:

Publicar un comentario