lunes, 31 de octubre de 2022

Mi triste legado.

Un día  me esfumaré 
y ya no me encontrarás,
sin duda me olvidarás 
y así te complaceré.


Todo  aquello que he vivido 
para mi, se ha de quedar
y a la hora de marchar,
seré una sombra en tu olvido.


Se quedarán mis poemas,
que tanto te molestaban,
pues  las rimas no brotaban
sobre tus míseros temas.


No sientes la poesía 
en toda su dimensión,
pues no tienes corazón,
ni la trabajas al día.


Intentastes mi trabajo,
apartarlo de la escena 
y eso me causa una pena,
aunque no se venga abajo.


La envidia no vencerá,
pues jamás te causé un daño,
mis versos, año tras año,
alguien por fin leerá.


Así pues, yo le he entregado 
mi vida a la Poesía
y florecerá ese día 
en que admitan mi legado.


Escrito en Octubre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



No hay comentarios:

Publicar un comentario