lunes, 30 de marzo de 2020

Ser bueno no es sinónimo de ser tonto.

No me vistan la luna de seda.
No me pinten de rojo este cielo.
No me digan adiós con pañuelo.
No me giren de nuevo la rueda.

No me escriban sobre mi memoria,
nunca duden de mis facultades.
No disfracen, ni oculten verdades,
mientras gira solemne, la noria.

No me oculten tras una sonrisa,
esa acción que ya fue programada,
porque intuyo vuestra puñalada,
la traición no es motivo de risa.

No me finjas ser buena persona,
es mejor proclamar lo que intentas,
la bondad, ya ha agotado sus ventas
y sabrás que jamás se perdona.

No me vuelvas a hablar del futuro,
que el mañana aún no ha llegado
y si observas cuánto te has negado,
tu presente verás que es oscuro.

No me busques la frase maldita
que se toma para prejuzgar,
no es el tiempo y tampoco el lugar...
piénsalo y tan sólo ¡Medita!.

Escrito en Marzo 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".


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