que buscan la claridad total.
Nada es tan bueno, como para no procurar
obtener su recompensa, aún en las más
sombrías intenciones.
Todo lo que es puro, dada su pureza,
queda a merced de toda impune maldad,
porque nada oculta, nada esconde,
pues cree que no es necesario, al pensar
que todos piensan de igual modo.
El mundo es depredador de la inocencia
y se puede perder la vida en un descuido.
La desconfianza nace de la duda,
cuando el cristal de nuestros anteojos
se empaña con oscuras acciones
y se pierde la confianza.
El temor no nace de la duda,
sino del dolor infringido, que da forma
a toda desconfianza.
No la hagas y así jamás tendrás que temer
sus consecuencias.
Escrito en Julio 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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