y precursor del aire y el viento.
Gaseoso espíritu, que emerge
de la nada primordial
o el limo substancial, que la tierra
me obsequió en mi mortal
cuerpo terrenal.
Soy aire, aire nacido de un suspiro,
de una noche de amor, de un letargo
y un despertar a la vida,
para quemar mi cuerpo en el ascua pura
de un sentimiento.
¡Aire, vuelo! Libre sobre todas las cosas
que merman, sujetas al tiempo
y a la irracionalidad de la perdida
brújula de nuestro origen.
Agua y aire, nacido de la tierra,
desde el útero profundo y materno,
a la bóveda celeste, donde se halla
nuestro origen divino.
Escrito en Agosto 2017 por Eduardo Luis Diaz Expósito."zuhaitz".
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