Tus labios tienen un filo mortal,
para sesgar una vida en la cual,
la ilusión se perdió en el estallido de un beso
que quedó en el olvido,
tratando de justificar un incierto tiempo
en que el fingimiento del amor, no fué
sino el espejo quebrado
de una realidad que soñamos.
Tus escuetos labios, abiertos como navajas
para cortar el ánimo desde la profundidad
de mi alma, que ansiaba un contacto amoroso
de sedas y ternuras.
No obstante, se sobrevive aún sin amor,
viviendo en una mentira creada,
en vanas quimeras e ilusiones efímeras,
sabiendo que su vida es corta
y debemos recrear la forma que dé
en el alma, un impulso nuevo de creer
en algo, aunque muera irremediablemente
de immediato al punto de haber nacido.
Escrito en Julio 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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