Sentir el mar escuchando tu voz, susurrando en mi oído o sentir la fragancia de las flores, sólo con aproximarme a la tibieza de tu cuerpo.
Creo en la magia que encierra el estallido de un beso sincero y el abrigo cálido que muestran los abrazos. La poesía tiene alma de niño y es inocente, pero es dura cuando la injusticia golpea con un cayado nudoso sobre las conciencias puras.
Amo la poesía y a quienes sienten su verdad en sus vidas.
Escrito en Noviembre 2018 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz ".
No hay comentarios:
Publicar un comentario