viernes, 14 de junio de 2019

Tal vez sea ese el hechizo.

Tal vez sea ese el hechizo, un leve roce
de miradas furtivas, huidizas,
que se encuentran en el fondo sonrosado
de un alma, que espera un encuentro,
para que se produzca esa catarsis de labios,
que estallan en besos que se prenden
en el aire, rompiendo el silencio.

Suben burbujas hacia tu mente y  producen
una efervescencia similar a una explosión
de hilaridad.

La felicidad es un espacio vacío
que llenamos de encuentros, abrazos y besos
enhebrados con tiernas miradas.

Escrito en Junio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

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