traerá un viento nuevo
y nuestros cabellos se irán lejos,
hacia la montaña blanca
de los inviernos eternos.
Vendrán otras primaveras
a ocupar nuestro lugar y las flores
se colmarán de rocío y de sonrisas.
Las voces llenarán los valles
y los murmullos del río,
recordarán nuestros encuentros.
Seremos espigas al viento,
copos de nieve que se funden en la tierra.
Tu y yo, brotes desprendidos,
hojas pasajeras, en un tiempo
que queda en el recuerdo.
Nuestros espíritus de verde líquen
pasarán a ser, la memoria de los árboles.
Escrito en Septiembre 2017 por Eduardo Luis Diaz Expósito."zuhaitz".
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