domingo, 15 de septiembre de 2019

La altura de nuestra mirada.

No bajo mi mirada de la horizontal, en la cual
todos ven mis ojos.
No enfrento la  mirada, bebo otras miradas
y pienso que es respetuoso ver los rostros
y las expresiones de las personas.

No creo que sea bueno bajar la mirada
y hacer oídos sordos a un saludo cordial.
Desear un buen día lleva una carga emocional
tan positiva, que debería compartirse.

Formando una cadena de buenas intenciones,
hacemos que el mundo mejore,
tan sólo basta una actitud decidida
y una sonrisa por bandera.

Quien no conoce esta verdad,
mira en sitio equivocado, pues en el suelo
sólo se mueven los papeles
y el polvo mundano que agita el viento.

Hay todo un universo que se encierra
en cada mirada y aprender a mirar
es aprender a vivir en armonía con los demás.
No bajemos nunca la mirada, las estrellas
brillan en lo alto y cada rastro de luz fugaz,
es un milagro que perdemos, si cabizbajos
bajamos nuestra mirada .

Escrito en Septiembre 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.






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