miércoles, 17 de agosto de 2022

Mi legado de versos y tristezas.

Mientras alguien me recuerde, aún 
para maldecirme…Soy leyenda.
No he de morir sepultado en la vulgaridad 
de las lenguas ociosas, que todo lo corrompen.


Alguien verá algún día, todo aquello que soy,
fui y siempre seré.
Por encima de todas las envidias, que 
sin fundamento, creen que todo viene
 del cielo, sin esfuerzo alguno.


Mi cuerpo maltrecho os puede hablar 
de sueño, sufrimiento y cansancio.
Del límite, que el agotamiento deja en duras
huellas sobre el rostro y el peso, que  siempre 
llevé sobre mis espaldas.


Yo no quiero hablar del verbo puro o el verso,
que nace en mi mente y desemboca en mi voz.
No quiero hablar del  humor que uso,
como disfraz de mis tristezas.


Nadie me conoce, nadie me cree, por ello
he de dejar testimonio de mi paso por la vida 
y tal vez, entonces comprendáis, 
que  los milagros  no suceden, si te quedas
en la cama, esperando que  amainen
las primeras lluvias.


Escrito en Agosto 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




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