lunes, 2 de diciembre de 2019

Mírame a los labios.

Mira mi labio poseso
en una actitud lasciva,
que intenta ser incisiva
sólo por robarte un beso.

Mira mi labio al hablar,
pues la palabra sentencia
aquello que la conciencia
ha decidido expresar.

Mira mi labio temblando,
no por temor o por frío...
por soledad ¡ Amor mío!
sé que te estás distanciando.

¡Mira mi labio, paloma!
si quise besar el cielo,
el producto de mi anhelo
se esconde y jamás se asoma.

Mis labios ya se han sellado,
silenciando una emoción,
que es fruto de una obsesión
y el cielo que me has negado.

Escrito en Diciembre 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.



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