sábado, 4 de junio de 2011

El día en que nací

Yo nací un día en que era preciso nacer,
una estrella al anochecer
me clavó sus espuelas de plata...
¡Mala pata!.
Ese fué mi primer desengaño.
luego se abrieron heridas
con el paso de la vida.
¡Largo paño
de lágrimas desvestidas!.

Yo nací un día de arrepentimiento,
no quise hacerlo,
aunque quiera parecerlo.
Yo me limité a cumplir
¡Y a vivir,
que la vida es un momento!.

Y aquí estoy,¡Triste de mi!,
soñando con lo eterno,
entre romántico y tierno,
y es que del claustro materno
nunca acabé de salir.

escrito por Zuhaitz en 1986

No hay comentarios:

Publicar un comentario