Capitulo,
no sé tu nombre,ni tu esencia,
y sin embargo te presiento.
Un frío vertebral recorre mi cuerpo,
y se desdobla el corazón,
como un mar hecho páginas de espuma.
Tu perfume es una bocanada de aire fresco,
una indefinible sensación
que burbujea y sube hasta mi mente,
poblando mis ojos de campanas y cascabeles.
Con una estrella prendida en mi pecho,
camino,
y busco sin hallar, la sombra de tu figura.
escrito por Zuhaitz en1987
No hay comentarios:
Publicar un comentario