preso del capricho de la emoción,
cuando amamos y sufrimos el amor,
por su escasez de medios
para habitarnos tanto tiempo
como deseamos .
Nómadas del destino y la adversidad,
que no se mancha con tus penas,
ni con tus anhelos.
Todo cielo es poco para colgar
de sus nubes, los ruegos
y las esperanzas, porque el viento
agita las nubes, como agita
las vidas y sus destinos.
Escrito en Abril 2017 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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