metida en el corazón
y alguna que otra ilusión
blanca como la azucena.
Una inquietud, que es profana,
que me hace perder la fe,
porque si en algo triunfé,
fué porque mi vino en gana.
Y así del mundo me río,
si acaso de mi han dudado,
el tiempo lo ha demostrado...
¡ me crezco ante el desafío!.
Nunca he tenido la suerte,
en un amor declarado,
siempre se me ha abandonado
y hasta casi, me divierte.
Soy un lobo solitario
que surge entre la maleza,
amo sólo la belleza,
la estoy buscando a diario.
Entre tanta negación,
se esconde una realidad
de belleza y de verdad,
que guardo en mi corazón.
Mi siglo, no es el que vivo,
ni mi mundo es el que habito,
todos nacemos de un grito,
sin conocer el motivo.
Soy extranjero y extraño
en este cruel planeta,
pero para hallar mi meta,
a nadie jamás le hice daño.
Me sujetan mis tendones
y mi fuerte voluntad,
os dejaré en heredad
mis poemas y canciones.
Escrito en Agosto 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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